Rodrigo Ogalde Cofré
Este sábado 2 de noviembre debería comenzar la temporada 2019-2020 de cruceros en el puerto de San Antonio. El terminal de DP World San Antonio (Puerto Central) se prepara para la primera recalada de este periodo que hará la nave Zaandam. Para eso ya está todo listo por parte de la empresa. Sin embargo, las movilizaciones sociales y la participación de los trabajadores en paros y marchas le están poniendo una cuota de incertidumbre a la operación.
Ayer, el gerente general de la compañía, Rodrigo Olea, dijo a Diario El Líder que "tenemos programada la recalada y está el sitio reservado y todos los medios dispuestos para atender el buque este sábado".
La preocupación que tiene la empresa es que los cruceristas, una vez que estén en el puerto, no puedan salir de la ciudad rumbo a sus lugares de destino, principalmente al aeropuerto de Santiago, o que incluso los que lleguen a embarcar finalmente no logren ingresar al terminal de pasajeros ubicado al interior de las instalaciones portuarias.
"Nosotros podemos dejar a los pasajeros en el puerto, pero qué pasa si no los dejan salir de la ciudad, ahí sí que San Antonio se deberá olvidar de los cruceros", advirtió Olea.
El ejecutivo agregó que la temporada 2019-2020 implicará 30 recaladas y la llegada de 100 mil cruceristas a San Antonio, lo que generará un circuito económico virtuoso para los emprendedores de la provincia.
COMPLEJO escenario
Claudio Nast, gerente general de Destination Management Chile (DMC), uno de los principales operadores turísticos de cruceros en el país, reconoció que las movilizaciones que se viven en el país y la paralización en algunos terminales hacen que "la situación esté súper difícil".
Nast contó que en medio de esta contingencia, el martes recién pasado se tomó la decisión de cancelar la recalada del crucero Zaandam que estaba programada para mañana en el puerto de Coquimbo. "No están dadas las condiciones porque para ese día está convocada la marcha contra Sebastián Piñera, justamente una movilización que puede producirnos muchas dificultades porque los turistas no van a poder volver de las excursiones para embarcarse y el barco no puede dejar que sus pasajeros corran algún riesgo, lo que es más grave todavía", agregó.
Así también, el ejecutivo de DMC recalcó que "es difícil cancelar la recalada del Zaandam en San Antonio porque allí tenemos el cambio de pasajeros. Esperamos que si la marcha más grande se produce el 1 de noviembre, el día 2, cuando estemos en San Antonio, no haya tanta problemática".
Consecuencias
Claudio Nast afirmó que si San Antonio no concreta la recalada del crucero Zaandam este sábado en el terminal de DP World, esto podría generar nefastas consecuencias para la concesionaria y para la ciudad. "Imaginemos si tuviéramos problemas de ese nivel, mucha gente tiene compromisos de vuelos y se tiene que ir y con esto también se asusta porque la mayoría son personas adultas mayores". En todo caso, descartó que Valparaíso esté en condiciones de recibir a los cruceros que otros puertos no puedan atender.