La rabia ha estado siempre entre nosotros
El episodio del quilpueíno mordido por un perro activó las alarmas, pero al año se reportan hasta 10 casos en animales.
Por años la rabia no fue tema en el país. La enfermedad se hallaba erradicada y no se habían reportado casos en humanos desde 1996, cuando un niño fue infectado por un murciélago, en Rancagua.
Sin embargo, el caso de César Barriga Torrejón, el joven que el pasado 3 de agosto fue mordido en Quilpué por un perro y que posteriormente se comprobó que tenía rabia, puso de nuevo esta peligrosa enfermedad en el centro de la discusión.
Hasta hoy, el joven quilpueíno sigue internado en el hospital Gustavo Fricke de Viña del Mar, en coma y conectado a un ventilador mecánico.
¿Es el caso de César Barriga sólo la punta del iceberg que se esconde tras esta enfermedad que, aunque usted no lo crea, siempre ha convivido con nosotros?
un desastre anunciado
Para el reconocido veterinario y director del Hospital Clínico Jonás Gómez, esta situación es "la crónica de un desastre anunciado".
"Durante el año 2010 -se explaya el especialista- se reconoció a Chile como un país libre de rabia canina; sin embargo, después de dicha fecha, en donde se realizaron fuertes campañas, la gente y las autoridades se relajaron. La situación de este joven es algo que se veía venir hace mucho tiempo".
Jonás Gómez recalca que actualmente "las autoridades sanitarias han tenido que llegar hasta el extremo del sacrificio de animales, porque todas las medidas previas que se tomaron o no se tomaron en torno al tema de la rabia fallaron".
El veterinario habla con propiedad del tema, ya que entre los años 2000 y 2005 fue asesor en el área de control canino en la región.
Tras realizar múltiples estudios, Gómez comprobó que en la comuna de Valparaíso en un solo día pueden existir cerca de 20 mil perros deambulando en las calles.
"Es una cosa realmente increíble y es una situación que definitivamente está así porque nadie hizo nada por evitarlo. Cuando estuve en la municipalidad, creamos una ordenanza municipal que ahora se encuentra durmiendo. En esa instancia creamos el primer registro canino a nivel nacional, un paso fundamental para iniciar cualquier tipo de plan de control canino. Ningún programa de control canino será exitoso si es que no existe este registro en donde una persona se haga cargo y sea responsable de su pero", apunta el profesional.
El experimentado veterinario agrega que sin una ley dura, que sancione a quien sea el responsable de un animal que cause daño a un humano, el asunto no tiene para cuando terminar.
fuertes multas
En Europa es muy difícil encontrar a un perro callejero deambulando por las calles. ¿La razón? Las fuertes multas a las que se exponen sus dueños.
La veterinaria rusa Elena Selezneva, quien se encuentra de paso por Chile y que colabora en el Hospital Clínico Veterinario cuenta la experiencia que se vivió en su país con respecto al tema.
"En Rusia hubo un momento en que también existían muchos perros callejeros y se tomaron medidas con los dueños. Allá la cosa es más sencilla y simple: persona que no cuida a su perro, recibe una multa, pero no una multa chiquitita, sino una multa grande", explica Selezneva.
Los montos de los que habla la veterinaria rusa van entre los $150 mil y los $250 mil. Según la profesional, los altos costos de las sanciones han hecho que la gente tome conciencia con respecto a la tenencia responsables de mascotas.
"Todas las personas que tiene mascotas deben preocuparse por ellas, sea como sea. No hay excusa para saltarse una vacuna o para dejarlo suelto en la calle. La autoridad sanitaria en Rusia es muy estricta y constantemente están exigiendo los controles y vacunas de los animales; allá las vacunas son gratuitas, pero existe una fecha específica para ponerla. Si es que la persona no lleva a su mascota, se arriesga a las multas", detalla.
"Acá lo que hace falta, más que esterilización, es educación. La persona debe ser educada en cuanto al cuidado de su mascota y su tenencia. Todos encontramos a los perritos bonitos cuando son cachorros, pero cuando crecen sus dueños los abandonan y es así como parte el círculo vicioso que hoy nos tiene con este caso de rabia", acota el veterinario Jonás Gómez.
autoridad sanitaria
Paulina Tapia nos recibe en una gran oficina del Servicio de Salud, en Quilpué. Ella es la jefa del Departamento de Acción Sanitaria y la enorme habitación en donde se encuentra trabajando parece haber sido extraída de una película en donde un investigador privado tiene pegados, en cada pared del cuarto, mapas, fotos y movimientos de su sospechoso.
Paulina Tapia es categórica: "Nosotros siempre hemos convivido con la rabia. La rabia se presenta en los murciélagos y es ese tipo de rabia la que no ha sido controlada. Por lo mismo es que la ciudadanía debe tener especial cuidado cuando vean murciélagos cerca de su casa. En primer lugar, si es que se encuentra un murciélago muerto, nunca hay que tomarlo con la mano. Lo mejor es ponerse guantes gruesos o con un palo echarlo al interior de una caja. Luego hay que llevarlo hasta el Servicio de Salud para hacer los análisis correspondientes en busca de rabia".
En cuanto al caso de César Barriga, Tapia señala que "el día 4 de agosto nos informan que existe un posible caso de rabia. Empezamos a recopilar todos los antecedentes y a investigar la situación. Finalmente, el día 10 de agosto se confirmó que esta persona se había contagiado con el virus de la rabia tras la mordida de un perro".
"Para nosotros un caso de rabia animal o humano constituye un foco de rabia, por esto existe un protocolo a nivel nacional que se debe llevar a cabo en este caso de situaciones. Nosotros al año tenemos entre 8 y 10 casos de rabia animal, al cual exclusivamente se da en murciélagos", explica la profesional.
Para Tapia, el tema de la rabia causa una mayor conmoción entre las personas por el hecho de que "en esta oportunidad hay un paciente humano que está siendo tratado por el virus y eso causa alarma en la población"
"Durante todo este proceso hemos recibido la ayuda de diversas protectoras y grupos ambientalistas, quienes nos ayudan a vacunar a los perros. Con estas agrupaciones hemos conversado en muchas oportunidades y ellos entienden que lo que estamos haciendo es por el bien de todos -añade Tapia-. En un comienzo tuvimos algunos conflictos en especial porque las personas no estaban bien informadas con respecto al tratamiento que recibían perros y gatos".
Cabe destacar que durante todos el plan de vacunación contra la rabia, el rango de acción ha sido entre 3 y 4 kilómetros desde donde se detectó el foco. Si usted es mordido por un perro desconocido o del cual no se tienen mayores antecedentes, deberá recibir el tratamiento de vacunación, el cual consta de cinco inoculaciones.