Los últimos días han sido de preocupación para Emilio del Carmen Morgado.

Este abuelito sanantonino de 78 años de edad vive en precarias condiciones en la parte alta de Bellavista, solo, con unas cuantas frazadas para su casa, unas ollas viejas y una malla como una especie de cortina. Algunos cartones y papeles cubren los espacios por donde se cuela la luz de la tarde, pero que de noche permite la entrada del frío y la humedad. De ahí que este invierno el brasero haya sido su mejor amigo.

Pero esa precariedad será peor en los próximos días porque no tendrá un lugar donde vivir, ya que le fue anunciado que deberá dejar este lugar para buscarse un nuevo espacio donde vivir.

Y de eso sí que sabe don Emilio porque en abril de este año estaba viviendo en un garaje en las cercanías de la población Bruselas II. Allí conoció del frío, el hambre y la soledad, hasta que unas personas le ofrecieron la posibilidad de vivir en la pieza que hasta ahora habita y que tiene que dejar sí o sí.

"Debía irme esta semana, pero no sé adónde voy a ir. No tengo a quién pedir ayuda ni que me reciban por unos días", dice.

-¿Esta completamente solo?

-Tengo unos hijos grandes que viven en Santiago, pero no puedo pedirles nada.

-¿Y qué va a hacer?

-No sé. No tengo dónde ir.

Emilio Morgado vive pobre y esperando que el Senama le asigne una casa. En eso tiene esperanzas.

-¿Cree que pueda resultar algo de eso don Emilio?

-Esperemos que sí. Ya ha venido la visitadora a encuestarme. Me hicieron un montón de preguntas y vieron como vivo aquí, pero no ha pasado nada. Hay tres casas al lado del consultorio de Bellavista. Dios quiera que una de esas casitas pueda ser para mí y estar tranquilo.

Emilio del Carmen Morgado vive a un costado de las casas de villa Génesis en la parte alta de Bellavista. Su celular es 8-5157090. No tiene a quien recurrir en estos días. "Ojalá me puedan ayudar, porque no puedo serguir viviendo así", dijo.

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