Secciones

El exfuncionario de Gobierno que se convirtió en productor de una película pornográfica

Claudio Barra asume este último desafío laboral como "una pega" más y asegura que al interior del set de filmación no hay espacio para las fantasías sexuales ni el erotismo. "Soy un profesional", afirma.
E-mail Compartir

Claudio Barra Cabrera (45) estaba estudiando la carrera de Multimedia en el instituto profesional Incacea de Viña del Mar cuando tuvo una gran prueba en el ramo de fotografía. Él y sus cerca de 20 compañeros tenían que hacer un desnudo. La modelo, según recuerda el propio Barra, era una joven irresistiblemente guapa. "Una yegua árabe", dice para graficar la inconmensurable belleza de la maniquí.

"Sólo tres compañeros pudimos tomar profesionalmente la fotografía. Todos los otros se pusieron tan nerviosos que no pudieron hacer las fotos", recuerda Barra, un reconocido adherente de Derecha, pero de los de verdad, de esos que no reniegan haber apoyado a Pinochet. "Yo sí voté por el Sí", dice sin tapujos.

La escena en el instituto profesional se repetiría varias veces después en la trayectoria de este fotógrafo barranquino. "La verdad es que he tomado hartas fotos de desnudos desde que salí del Incacea, hace ya 13 años", confiesa.

Este oriundo de San Antonio cuenta que las mujeres que le solicitan desnudos son, en su mayoría, amigas, conocidas y pololas de sus propios amigos. Y también desconocidas que llegan por recomendación de otras féminas que han posado para su cámara.

-Es que dentro de la fotografía el desnudo es algo normal, tanto como un retrato o un paisaje. La gente que me conoce sabe que soy un profesional y me tiene confianza.

night club

Haciendo un rápido cálculo mental, afirma que ha tomado más fotos de desnudos que de matrimonios, especialmente después que Juan Pablo Alarcón, el dueño del night club Angels de Barrancas, lo contactara para hacer una revista erótica que próximamente saldrá al mercado. Sólo en el último mes más de 30 chicas han pasado por delante de su lente sin un centímetro de género en el cuerpo.

Pero hubo un tiempo en que Claudio Barra se dedicó a otras cosas que nada tuvieron que ver con la fotografía. Egresó como contador de un liceo técnico y trabajó en una agencia de aduanas. Después tuvo una empresa de limpieza de alfombras. Fue en ese tiempo cuando se dio cuenta que el futuro estaba en los medios audiovisuales.

Tras titularse, montó con negocio de sitios web y diseño gráfico en Viña del Mar, pero tras la jubilación de su madre decidió retornar a su natal San Antonio. Su primera pega fue grabar la segunda y frustrada campaña a diputado de Carlos Hidalgo. Luego, en su calidad de militante RN, apoyó a René Mira en su postulación a la Alcaldía -que terminó perdiendo ante Omar Vera- y posteriormente se transformó en fotógrafo de la primera campaña al Congreso de María José Hoffmann. Esta vez la candidata sí salió triunfadora.

Tiempo después le ofrecieron ingresar a la Gobernación Provincial de San Antonio. No le pensó mucho y se convirtió en funcionario gubernamental. Entró como segundo a la Oficina de Protección Civil y a los pocos meses quedó a cargo de la repartición.

"Estuve en ese cargo más de dos años, hasta que renuncié. En el último tiempo cambiaron las condiciones y consideré que ya no podía hacer el trabajo como yo quería, con el compromiso que a mí me gustaba", asegura.

-¿Tuviste algún round con el gobernador Mauricio Araneda antes de renunciar?

-No, sólo que la autoridad (dice refiriéndose a Araneda) había perdido el interés en la emergencia, y eso para mí fue frustrante. Me dijeron que bajara las revoluciones y preferí dar un paso al costado antes que ponerme a pelear.

al porno

Barra, con su humanidad que fácilmente debe superar los 110 kilos sobre la balanza, es un tipo simpático, carismático, fácil de llevar. Por eso nunca le ha costado encontrar empleo.

Tras salir de la Gobernación, empezó a trabajar en la empresa de diseño Gigantografía Digital, junto a su amigo Javier Gaete. Y los últimos seis meses retornó a la política como jefe de campaña de otra de sus amigas, Rous Rould (UDI), candidata a consejera regional.

"No ganamos, pero lo pasamos increíblemente bien. De todas formas, el saldo es positivo porque logramos una adhesión importante a pesar de contar con muy poco apoyo", resume sobre su última aventura política.

Estaba en plena campaña cuando Juan Pablo Alarcón le ofreció hacer la revista triple X para su local Angels. Y en ese período conoció a Marlen Dolls, la autoproclamada primera actriz porno chilena, y surgió una nueva propuesta laboral: ser el productor, camarógrafo y editor de la primera película pornográfica filmada en San Antonio, que tendrá como principal protagonista a la Dolls y dos actores sanantoninos autodidactas con ganas de emprender en este género.

Barra, que se define como un aventurero, se embarcó en este nuevo e insólito mundo.

"Este trabajo lo veo como una pega más. Estoy gratamente sorprendido con el profesionalismo de Marlen Dolls. Ella se formó como actriz porno en Europa -en España, específicamente- y sabe mucho de este rubro", afirma.

-Francamente no, así que no nos quedó otra opción que comenzar a ver muchas películas de este género para hacer bien el trabajo que me encomendaron.

-¿Y en qué etapa va la película?

-En estos últimos días hemos realizado varios ensayos con los dos actores, que han andado muy bien. Y en los próximos días esperamos empezar con la filmación de la película.

-Los cabros son empeñosos y valientes. Han andado muy bien en las pruebas. Por algo fueron elegidos por Marlen.

-La verdad es que no. Uno está más preocupado de la parte técnica que de lo que están haciendo los actores.

-Si es cierto. Hay muchas cosas de qué preocuparse, como la calidad de la luz, del sonido y la escena misma. Además, Marlen es bien exigente porque sabe de qué se trata este cuento. Y uno trata de ser lo más profesional posible.

PROFESIONAL

PROFESIONAL

-Es un género como cualquier otro que requiere tantas exigencias como cualquier película.

-Yo diría que tendrá una alta calidad, partiendo por la actriz, que claramente es un profesional en este género. Y hoy contamos con todos los elementos técnicos para que todo salga a la perfección.

-La verdad es que no tiene mayores reparos. El comentario es el mismo de siempre: hace seis años junto a José Luis Brito participé en la última expedición para encontrar al teniente Bello en la zona. Mi mamá y mi familia saben que soy un aventurero. Además soy soltero y sin hijos, lo que me permite manejar el timón a mi manera y hacer cosas que muchos quisieran hacer, pero que no pueden por distintos motivos.

-De verdad. Las preocupaciones son tantas que no hay tiempo para calentarse con nada. Uno no puede tener el control de la situación en un ciento por ciento y eso se obliga a estar alerta en el trabajo.

-¿Algún sueño por cumplir?

-Quiero hacer un libro con retratos de sanantoninos del siglo XXI para dejar un legado para las futuras generaciones. Y me gustaría tener un taller de fotografía y dedicarme a hacer retratos, paisajes y, por supuesto, desnudos. J

"Dentro de la fotografía el desnudo es algo normal, tanto como un retrato o un paisaje. La gente que me conoce sabe que soy un profesional y me tiene confianza".

"Este trabajo (como productor de la película porno) lo veo como una pega más. Estoy gratamente sorprendido con el profesionalismo de Marlen Dolls. Ella se formó como actriz porno en Europa y sabe mucho de este rubro".

"Soy soltero y sin hijos, lo que me permite manejar el timón a mi manera y hacer cosas que muchos quisieran hacer, pero que no pueden por distintos motivos".

Registra visita