"Nosotros hacemos los intentos para abrir las puertas y poder dialogar con el Gobierno, pero cada vez que tenemos una reunión lista, ésta se nos cae", explicó ayer el dirigente portuario Sergio Vargas ayer en medio de una marcha realizada por los trabajadores y que terminó sin incidentes.

Vargas señaló que ayer se reunirían con un ministro, no quiso indicar cual, pero que a última hora esta cita se cayó.

"Esto es muy serio. El Gobierno tiene que sensibilizarse y conversar con nosotros, si no nos abren una puerta para conversar no sé cómo lo vamos a hacer para solucionar este paro. El tema ya no pasa por los trabajadores", declaró.

"Nosotros estamos dispuestos a llegar hasta las últimas consecuencias y eso significa que vamos a seguir paralizados hasta que sea necesario", agregó.

Vargas fue enfático en señalar que el paro en el Puerto de San Antonio no ha terminado, como según él, lo quieren hacer creer algunos.

"Durante estas dos últimas semanas han hecho todos los esfuerzos por tratar de botar el movimiento, sobre todo cuando la empresa dice que el puerto está trabajando, pero éste sigue paralizado. Como una forma de presionar, entraron buques a los sitios de atraque, pero ahí están paralizados", sostuvo.

Además se mostró muy molesto con la "personalización" que se hecho del paro.

"Déjense de personalizar el movimiento. Los dirigentes no somos los que mandamos, son las bases. A nosotros lo que nos preocupa es que el puerto esté parado y que nuestra gente no esté trabajando y que mucha gente más se vea perjudicado", enfatizó.