Fin a la tregua: el puerto vuelve a estar en paro
La paralización de las faenas en San Antonio se hizo efectiva anoche, a contar del tercer turno.
Fresca está en la memoria de los sanantoninos los bocinazos, gritos y vítores que los trabajadores portuarios realizaron llenos de alegría y emoción la tarde del pasado sábado, cuando tras 22 días de paralizaciones habían decidido levantar el paro portuario, luego que una reunión entre el movimiento sindical y representantes del Gobierno destrabara el conflicto que había sumado pérdidas millonarias para las empresas concesionarias del puerto de San Antonio.
Sin embargo, faltaba quizás el punto más importante en discusión, que era la aprobación de parte de Puerto Central de lo acordado en la reunión entre los representantes del Frente de Trabajadores Portuarios y funcionarios gubernamentales, encabezados por el ministro del trabajo Juan Carlos Jobet.
todo a cero
Finalmente, este acuerdo no existió, y tal como lo explicó anoche Julio Castillo, dirigente portuario "todo se vuelve a cero. Los 22 días de huelga no sirvieron al parecer para nada, y ahora vamos a tener que nuevamente comenzar las negociaciones, las reuniones y las mesas de diálogos entre las partes involucradas. Con el incumplimiento del señor Olea (gerente de Puerto Central), no queda más que volver a parar las faenas en el puerto de San Antonio".
Castillo, visiblemente molesto por no haber llegado a un acuerdo, asegura que "ahora la postura de los trabajadores portuarios se endurecerá el doble".
los otros puertos
Tras comenzar el paro durante el comienzo del tercer turno, es decir desde las 23.00 horas de la noche de ayer, el movimiento comenzó inmediatamente las conversaciones para que los trabajadores de los otros puertos a lo largo del país se sumen a las movilizaciones, y se logre llegar a un paro a nivel nacional.
siguen parados
Las empresas que están siendo afectadas por esta movilización son Puerto Central, Puerto Panul y San Antonio Terminal Internacional, empresas cuyos sindicatos decidieron temprano ayer apoyarse mutuamente si pasaba lo que finalmente ocurrió: que no se llegó a buen puerto en las negociaciones.
