"Mi hijo de 3 años fue violado y la justicia aún no detiene al autor"
Según la denuncia de la madre, el menor habría sido violentado por un tío hace más de tres meses.
Valeria del Pilar Maldonado Rojas (43) llora de rabia e impotencia a lo largo de toda esta entrevista. Confiesa que los últimos tres meses han sido una atroz pesadilla.
Su infierno comenzó un día de octubre pasado cuando el menor de sus dos hijos, de sólo tres años, volvió a su hogar, en una parcela de la apacible localidad rural de El Totoral, en El Quisco, tras permanecer en la casa del lado, de propiedad de una hermana de Valeria Maldonado que vivía ahí junto a su pareja, un hombre de más de 50 años.
"Ese día el niño venía sucio y cuando lo fui a bañar me dijo que le dolía el potito. Lo revisé y tenía heridas, pero pensé que eran producto de una cocedura", cuenta la progenitora sin poder contener las lágrimas.
Aquel día el menor no pronunció más palabras, pero sí lo hizo algunas semanas después. "El 1 de noviembre el niño me contó que su tío, la pareja de mi hermana, lo había llevado a un bosque cercano y que le había hecho algo en el potito. Incluso me pasaba un palo para que le fuera a pegar", recuerda.
Valeria, por miedo, no quiso enfrentar inmediatamente a su hermana y al supuesto victimario de su hijo. Pero sí se atrevió a estampar la denuncia correspondiente en la Fiscalía de San Antonio.
El Ministerio Público inició la investigación y una de las primeras medidas fue solicitar al Tribunal de Familia el desalojo del tío, de iniciales L.V.C., quien tuvo que mudarse a El Quisco, lejos de la casa de El Totoral, medida de protección que durará hasta el término de la indagatoria. Pero Valeria no está conforme con el proceso judicial.
"Hace tres meses presenté la denuncia. Mi hijo de tres años fue violado y aún no detienen a ese hombre. Yo sufro todos los días pensando en el daño que le hizo. No puedo entender por qué todavía está suelto", alega la madre, visiblemente desesperada.
"Hay cosas que simplemente no entiendo. La sicóloga de la Fiscalía me dijo que si el niño no contaba lo sucedido en dos sesiones el caso se podía cerrar. Pero cómo pretenden que hable altiro, si sólo tiene tres años. Hay casos en que los niños pueden hablar recién después de varios meses", manifiesta.
Cuenta que el menor cambió su conducta después del ataque. "Antes era un niño alegre, pero ahora lo veo más triste, y eso me duele mucho como madre", dice, junto con informar que el niño está asistiendo a sesiones sicológicas de reparación en un centro especializado.
"Lo que yo quiero pedir públicamente es la asesoría de un abogado particular para que se agilice esta investigación, porque no puede ser que este hombre ande libre por la calle como si nada hubiese pasado. Lamentablemente yo no tengo los recursos económicos porque soy jefa de hogar, por eso no puedo pagar un abogado privado", cuenta.
Valeria siente pánico al pensar que el caso pueda cerrarse y que la pareja de su hermana regrese a la casa del lado, que está separada de la suya solo por unos alambres. "He visto que en la Fiscalía no han tenido interés por atender a mi niño como se debe. También fui a pedir ayuda a la unidad de víctimas de delitos en la Gobernación, pero me dijeron que no podían ver el caso de mi hijo porque era muy pequeño".
"Mi hijo le ha contado lo que pasó a varios miembros de mi familia, que han declarado como testigos, pero al parecer han servido de poco los testimonios. Quiero hacer un llamado al Presidente de la República para que por favor vea este caso y apure el proceso judicial, porque yo y mi hijo no podemos seguir esperando. Necesitamos tranquilidad y la tendremos sólo cuando este hombre esté preso".
-No descartan ni confirman la violación porque transcurrió más de un mes desde la violación hasta que se le practicaron los exámenes.
-Porque el niño no contó inmediatamente, tal vez por temor. Lo hizo tres semanas después y ahí puse la denuncia. Lo único que quiero es que el caso no se cierre antes de que se haga justicia con mi hijo.
Todo lo posible
El fiscal a cargo del caso, Alvaro Mansilla, declaró a El Líder que ha hecho "absolutamente todo lo que está a mi alcance para que la investigación avance con celeridad. Solicité un informe a la Brigada de Delitos Sexuales y Menores (Brisexme) de la PDI y también las pericias sicológicas del menor, pero todo tiene un tiempo".
Respecto a los reclamos de la madre sobre lo que supuestamente le habría dicho la sicóloga de la Fiscalía, el abogado Mansilla aclaró que "no es cierto que el caso se pueda cerrar porque el menor no hable. Lo que ocurre es que la pericia sicológica corresponde a un examen de credibilidad que se efectúa en dos sesiones. Es un mismo test que se hace a nivel nacional".
Agregó que "este examen no es para reparar el daño en el niño, pues eso se está haciendo a través de un centro especializado al que fue derivado a través de esta Fiscalía".
Finalmente, el persecutor dijo que en un plazo máximo de dos meses debería cerrar la investigación, tras lo cual se evaluará una eventual formalización contra el imputado.
"Yo sufro todos los días pensando en el daño que le hizo a mi hijo. No puedo entender por qué todavía está suelto", Valeria Maldonado, madre del niño supuestamente violado.
