La peluquera canina que la rompe con lindos cortes fifí
Desde hace 17 años que una sanantonina hermosea a los regalones de la casa y hasta en 20 minutos.
Beatriz Silva Díaz comenzó a "peluquear", como dice ella, desde el año 1996 ayudando a un peluquero canino que venía desde Santiago a la Clínica Veterinaria de Plutarco Zúñiga.
"En ese tiempo se cortaba el pelo sólo una vez a la semana, porque acá no había nadie más que cortara el pelo. Después que él me enseñó me dijo que se iba y que yo ya estaba lista para trabajar sola", comentó.
Desde ese entonces Betty como es conocida, se ha dedicado siempre a este rubro.
A los 22 años se compró una máquina Oster de una sola velocidad y un par de tijeras para salir a trabajaba "a domicilio" con sus primeros clientes.
"Partía con mi mochila a atender a varios perritos, aunque lo bueno era sólo en verano. La mayoría de gente prefiere cortarles el pelo en verano para cuidarlos del calor y las espigas que se les pegan en las patitas", agregó.
Después de esta itinerancia, Beatriz descubrió que había mucha gente que se interesaba en este servicio y junto a su amor por los animales descubrió que podía dedicarse a este oficio.
Clientes
Beatriz comenzó a ganarse la confianza de sus primeros clientes. Se manejaba con la atención de diez perritos al mes, más o menos. Hoy ya cuenta con una clientela de 30 canes.
"Hay días en que un sólo cliente me trae dos o tres perros, pero hay días en que no traen ninguno, así que es muy irregular, pero desde que comencé hasta ahora tengo clientes fijos, que siempre me buscan", revela.
Como amante de los animales, Beatriz ya tiene en su casa cinco perros, tres yorkshire, un pastor alemán y una mezcla de poodle. Dos de estos los ha recogido de la calle, sin contar todos los que ha recogido, y que después de ayudarlos a recuperarse, les ha conseguido un hogar.
Después de haber vivido en San Antonio y haber tendido a sus primeros clientes en la calle Arturo Prat, obtuvo su casa propia en Cristo Rey y ahí está instalando nuevamente su peluquería canina.
Los cortes sencillos tienen un costo de 12 mil pesos, mientras que los que tienen más trabajo pueden ir aumentando.
"Lo que siempre recomiendo es que traigan a los perritos bañados y cepillados, porque así es mucho más rápido mi trabajo y ellos se estresan menos", dice.
-¿Qué haces si te traen un perro bravo?
-Siempre le pregunto a los dueños acerca del temperamento de sus mascotas y si son muy inquietos o bravos no los atiendo. Los mando a otra parte.
-¿Pero los puedes sedar?
-Yo no. No soy veterinaria y es una responsabilidad muy grande, por eso prefiero no atenderlos. He conocido varios casos de peluqueros caninos irresponsables que por sedar a los perros hasta se les mueren.
-Si vienen bañaditos, peinados y sin motas, unos veinte minutos. El primer año me demoraba una hora y media. Ahora soy seca.
Los interesados en hermosear a su regalón pueden llamar a Betty al 97339784.
El antes y el después
"Si son muy inquietos no los atiendo". Beatriz Silva Peluquera Canina
Complementará el servicio con baños
Dentro de los planes de Beatriz se encuentra un proyecto para construir su local en su mismo domicilio y poder formalizar su negocio.
Hace unos cinco años se adjudicó un proyecto Fosis, que le permitió construir una pieza en su casa en Cristo Rey donde realiza su trabajo, sin embargo, esta construcción aún espera el financiamiento para dejarla en la forma óptima que necesita para el desarrollo de su oficio.
También contempla la instalación de una tina para poder ofrecer el servicio de baño de mascotas.
"Hace tiempo que tengo este proyecto, sólo falta ganar uno de los fondos concursables y dejar todo perfecto para realizar mejor mi trabajo", cuenta Beatriz.
Mejoramiento
