Secciones

Conozca cómo se prepararon las comparsas que encantaron a miles de sanantoninos

Detrás de la fiesta hay cientos de horas de trabajo de los distintos sectores y un importante esfuerzo económico.
E-mail Compartir

El domingo pasado terminó el tradicional Carnaval de San Antonio, una fiesta que maravilló a grandes y chicos en las cuatro jornadas en que avenida Barros Luco se llenó de música y color.

Pero detrás de las celebraciones hay cientos de horas de trabajo de los vecinos de los sectores que participan, meses de dedicación y esfuerzo para encantar al público y el jurado.

En esta última versión del Carnaval, el sector de 30 de marzo ganó por partida doble: se llevaron el primer lugar en comparsas y también su carro alegórico, que rememoraba al ombú de la plaza de Llolleo, se impuso en una reñida competencia.

La final estuvo tan estrecha que no todos salieron conformes con los resultados. En Villa Las Dunas se encuentran evaluando si volverán a participar de esta fiesta. Y es que su carro alegórico en forma de cisne obtuvo el segundo lugar, cuando ellos esperaban alzarse con el triunfo.

Son las cosas de las competencias, no todos pueden ganar. Aunque si coinciden en que indudablemente gana San Antonio y sus ciudadanos.

Meses de trabajo

En marzo del año pasado la comparsa de la 30 de marzo comenzó los preparativos para el carnaval. Estaban molestos por lo que había pasado en la versión anterior: en la última pasada frente al jurado no pudieron lucir los trajes que habían mandado a confeccionar.

Es un trago amargo que prefieren no recordar, pero que sin dudas les dio más fuerzas para hacer un espectáculo digno de premio.

Participar en la fiesta no es fácil, se requiere de gente dispuesta y que esté disponible para gastar mucho tiempo.

"Una de las cosas más importantes de esta fiesta en la unión de los vecinos, no hay nada que decir en nuestro sector. La gente rema para el mismo lado", señala Miriam Rubio, una de las delegadas de la 30 de Marzo.

"En la comparsa misma, entre las personas que bailan y se disfrazan tenemos un cálculo superior a 100 y detrás de todo, con la gente que hace las cosas y está motivada, son mucho más de doscientas personas", cuenta la sanantonina.

Entre todos ellos son capaces de ponerse de acuerdo y organizar decenas de actividades para recaudar fondos, pues no es barato hacer una comparsa.

"Durante todo el año nos movemos con distintas cosas para tener plata. Hacemos bingos, rifas, de lo que sea para juntar dinero", dice la delegada de la comparsa ganadora.

"Este año gastamos cerca de 8 millones de pesos entre todo lo que se hizo, desde los trajes hasta el carro alegórico", detalló.

OMBU

El carro alegórico que desfiló por avenida Barros Luco pretendía resaltar algo importante para la historia de la comunidad.

"En los preparativos surgió la idea de hacer el ombú que tenía la plaza de Llolleo, porque se podía reflejar una parte de nuestra historia como sanantoninos. Quisimos alejarnos de las cosas más poéticas que habíamos hecho en años anteriores y mostrar algo más concreto. Lo más importante es que está hecho con materiales reciclados", cuenta Miriam.

La construcción de ombú demoró cerca de dos meses, desde que se armó su estructura hasta que se pudo completar "con la ayuda de los niños y de la gente más grande", dicen en la 30 de Marzo.

TRAJES

Cómo y dónde nace la idea del diseño de los trajes, es casi irrastreable, se pierde entre las voluntades de las personas que aportan anónimamente para llevar en alto el nombre del sector en que viven.

"El diseño de los trajes, y que es lo que queremos mostrar es súper conversado entre todos, esto es un trabajo en comunidad", dice la señora Miriam Rubio, quien recalca que esto es trabajo de las familias y el sector.

"Entre todos, luego nos repartimos las tareas para hacer todo a mano, coser y armar los trajes. Vamos a una casa, después a otra y así vamos tratando entre todos de completar las cosas", cuenta.

Los trajes de colores sólo se usan una vez, cada jornada del Carnaval cambian su atuendo para tratar de conquistar al público y al jurado que otorga el premio.

En total se confeccionaron cerca de 450 disfraces de todas las medidas, para los adultos y los niños que desfilaron frente a miles de personas

Felicidad

"Cuando salimos como los ganadores teníamos una felicidad enorme. No se como describir eso. Estaba feliz, muy feliz", recuerda Miriam.

En la 30 de marzo todavía no piensan en el próximo carnaval, aunque saben que para ganar nuevamente tienen que empezar pronto a planear lo que mostrarán en el 2015.

Saben que tienen un gran desafío por delante: mantener la victoria.

"Por ahora vamos a celebrar, pero luego vamos a mentalizarnos en lo que vamos a hacer después", dice la vecina que se muestra orgullosa del triunfo de un sector emblemático de San Antonio.

"Esta fiesta es de todos y ojalá se siga haciendo por mucho tiempo más, ya es parte de nuestra tradición", finaliza la representante de la 30 de Marzo.

Segundo lugar

En Villa Las Dunas no están contentos. Dicen que no hay molestia con el segundo lugar obtenido con el carro alegórico en forma de cisne, pero que "no están conformes", ni con el premio, ni con el jurado que evaluó las presentaciones.

"Quedamos con una sensación rara al no poder obtener el primer lugar. No es que estemos picados, el puesto que sacamos no es malo, pero creemos que el jurado no sirvió para este Carnaval", dice Elsa Vargas, de la comparsa de Villa Las Dunas.

"Este jurado que trajeron no sabe de Carnaval. Se fijó en cosas como el esfuerzo, en la representación y cosas por el estilo, pero no en la belleza del espectáculo. Si es por eso, nosotros y todas las demás murgas y comparsas se esfuerzan harto y hacen un gasto de dinero importante", agrega la vecina de Las Dunas.

"No es que seamos malos perdedores, lo que pasa es que la gente nos aplaudía fascinada con nuestro cisne, lo encontraban muy lindo. Entonces eso no se reconoce, ni con la comparsa ni con el carro", dice la señora Elsa.

"Hay gente que está pensando en no volver a participar si pasan estas cosas, que nos dicen "y para que vamos hacer todo ese esfuerzo otra vez, si nos van a salir con cosas raras", entonces no estamos conformes con la gente del jurado", dice molesta

30 mil bolsas

Pero más allá de las polémicas, el carro alegórico con forma de ave encantó a los sanantoninos que vieron su paso el domingo.

Muchos se preguntaban cómo se había hecho. Bueno, acá tiene la respuesta.

En los preparativos de Villas Las Dunas, que partió hace casi un año atrás, pensaron en que la última pasada ante el jurado sería vestidos como cisnes, y para que el carro alegórico tuviese el mismo tema emprendieron la ardua tarea de confeccionar al plumífero.

Una estructura metálica, envuelta con una malla de gallinero permitió que en ella se amarraran 30 mil bolsas blancas de plástico. Por cerca de dos semanas, una persona dentro de la estructura y otra afuera envolvieron al cisne hasta vestirlo completamente.

"Es un tremendo trabajo de los niños, sobre todo, que participaron con tanto esfuerzo. Y que la gente de la calle reconoció", dice Elsa Vargas.

Es de esperar que con el paso de los meses, se alejen las polémicas y nuevamente estos sanantoninos protagonicen una fiesta que llena de alegría nuestras calles.

"La sensación de ganar era de una felicidad enorme, que todo el esfuerzo y el tiempo que habíamos dedicado era reconocido",

"Esto es casi un año de trabajo, ahora vamos a aprovechar de celebrar y dentro de poco a pensar en que vamos a hacer para el otro carnaval"

"Hay gente de Las dunas que no está muy segura de querer volver a participar en el carnaval otra vez",

Registra visita