Así es la vida de un pequeño que sueña con ser un grande en el tenis
Sábado 15 de febrero. 7 de la mañana. Plena época estival en Chile y Christian Garcés (9 años) continúa con su rutina habitual de levantarse a las siete de la mañana, pero no para ir al colegio, sino que para preparar su bolso y raquetas y partir a un nuevo torneo, ahora en San Alfonso del Mar en la provincia de Algarrobo.
Y es que así transcurren todos los fines de semana para Christian y tantos otros niños que integran el deporte blanco en nuestro país.
Si bien, el tenis no lidera las preferencias de los chilenos que vibran con el balompié, es paradójicamente este deporte el que ha dado grandes promesas y alegrías al país.
Christian Garcés Labbé llegó al tenis accidentalmente hace un año, buscando una actividad recreacional veraniega. Al cabo de dos meses de entrenamiento, se dio cuenta que el tenis era el deporte de su vida. Los logros fueron tan rápidos, que su profesor Alex Varela, decidió integrarlo a la selección del club 140 de Maipú, y en tres meses, empezó a jugar sus primeros torneos y en el mes de diciembre obtuvo el premio a Mejor Proyección del año por su sorpresivo avance en el tenis.
"Mi mamá me inscribió en clases de natación en enero del año pasado, y a mí no me gustó, y decidimos probar en tenis. A los pocos días fui a un torneo en Quinta Normal, y gané todos mis partidos, incluso a niños más grandes y eso me hizo sentir que podía seguir avanzando en este deporte", comenta el pequeño Christian Garcés.
Camino difícil
Pero lo que muchos no saben es que llegar a tener buenos resultados es muy difícil, ya que el tenis es un deporte caro y que implica muchas horas de entrenamiento a la semana , que se deben compatibilizar con el colegio de jornadas muy extensas. "Salgo del colegio a las cuatro y media, alcanzo a llegar a mi casa, cambiarme ropa y partir a entrenar de seis a ocho . Vuelvo me ducho y veo mis tareas, esto es tres veces por semana, así es que debo organizar muy bien mi tiempo, porque rendir en el colegio es mi condición para seguir haciendo lo que me gusta", comenta Christian.
Para sorpresa de sus profesor Alex Varela, Christian Garcés quedó ranqueado dentro de los diez mejores de Chile, y ya este año está en el segundo lugar del ranking en su categoría.
Le antecede Cristóbal Fuentes, su amigo y compañero de equipo, un pequeño que entrena en su club desde los cuatro años, y es el número uno de Chile hace un tiempo ya.
"El tenis es lo que más me apasiona en la vida, y no me importa levantarme temprano en vacaciones, casi ni duermo cuando tengo torneo y mis padres me retan a veces porque sólo hablo de tenis. Ellos me dicen , que si no llegó a ser tenista de seguro , puedo ser relator deportivo", explica sonriente el pequeño Christian Garcés.
