Un nuevo capítulo en la sórdida historia del suicidio de un salvavidas que baleó a su prima y a su sobrino podría comenzar a escribirse y esta vez de mano de una de sus protagonistas.

Pamela Palma Santis (44), la mujer que sufrió cuatro heridas de bala, recobró el conocimiento y hasta habló con sus familiares.

El pronóstico frente a la salud de la mujer era el peor, pero desde la noche del miércoles de esta semana Pamela fue desconectada del respirador artificial que la mantenía con vida desde que ocurrió la tragedia el jueves 13 de febrero.

"Esto es un milagro, no tengo como explicarlo. Como familia estábamos muy mal y esperando el peor desenlace", expresó Cristian Palma, hermano de la afectada.

Pamela recibió un tiro en el abdomen y otros en el tórax, lo que provocó que perdiera un riñón y el vaso, que se le perforara un pulmón y que tuvieran que extraerla gran parte de sus intestinos. Pese a todo ello Pamela despertó y le dijo a su familia que estaba feliz de verlos y que se repondría.

Cristian relató que cuando preguntó por sus hijos debieron contarle que el menor de ellos, de 9 años, también fue herido de bala y que está hospitalizado.

"Le dijimos que se está recuperando bien, pero no pudimos ocultárselo", expresó el hermano de la herida.

Como Pamela fue baleada en su casa no supo qué pasó con Juan Carlos Salazar, el autor de los disparos.

En este sentido, la familia de la mujer convaleciente no quiso revelarle que el hombre de 51 años se quitó la vida tras el ataque.

"Nos preguntó si lo habían atrapado (a Salazar), pero nosotros cambiamos el tema porque el médico nos dijo que no se podía alterar ni impresionar por nada debido a su estado de salud", explicó Crisitan Palma.

El hombre además dijo que "cuando mi hermana esté mejor le contaremos cómo pasaron las cosas y ella nos relatará toda la verdad de lo que pasó esa mañana".

Palma Santis se mantiene internada en la Unidad de Cuidados Intensivos del hospital Carlos van Buren, ya que aún su estado es crítico.

"Estamos optimistas en lo que viene. Ella también está con mucha fuerza para salir adelante, incluso dice que tiene hambre, lo que es un buen síntoma, aunque por ahora no puede comer por su estado de salud", explicó el hermano de la afectada.

Pamela Palma está en franca recuperación, pero aún necesita dadores de sangre, pues su estado sigue siendo crítico y deberá enfrentar nuevas intervenciones quirúrgicas. Por lo mismo la familia llama a donar sangre en su nombre en el hospital Claudio Vicuña.

Dadores