50 familias en toma quedarán en la calle por orden de desalojo
Están desesperadas porque el municipio ya las notificó. A fin de mes demolerán sus humildes viviendas.
No duermen por las noches, les da miedo dejar sus viviendas solas durante el día y viven con una constante angustia. Todo porque en cualquier momento les demolerán sus casas.
Cincuenta familias que habitan en una toma de Playas Blancas recibieron el 5 de diciembre de 2013 la primera orden de demolición por parte del municipio, pero entonces presentaron un recurso de protección ante la Corte de Apelaciones de Valparaíso. Y dicha orden no se cumplió. Pero ahora todo cambió.
Nuevamente los vecinos están con el alma en un hilo dado que la última notificación por parte del municipio de El Tabo indica que tienen plazo hasta el 31 de marzo para abandonar el terreno donde se encuentra la toma, pues antes de esa fecha echarán las viviendas abajo.
"Lo que queremos nosotros es un plazo para regularizar nuestra situación porque hemos reunido dinero para comprar el terreno de la toma y así ser propietarios, pero para concretar todos los trámites necesitamos más tiempo. No alcanzaremos a hacerlo antes de fin de mes", explicó la presidenta del comité "Grupo habitacional Los Cisnes", Angélica Trincao.
La dirigenta explicó que desde el año pasado comenzaron a hacer la documentación y a reunir fondos para comprar el terreno que pertenece a un particular.
"A través de una corredora de propiedades contactaron al dueño y éste está dispuesto a vender", aseguró Trincao.
"Lo que nos pidió el dueño del terreno como requisito es que el comité contara con personalidad jurídica y en ese trámite nos demoramos mucho, pero ya la tenemos. Ahora sólo falta concretar la compra", aseveró la dirigente.
En el terreno de la toma hay 50 humildes viviendas y todas ellas podrían ser demolidas.
"Es todo lo que tenemos, nos ha costado mucho reunir nuestras cosas. Estamos asustados de que un día llegue una retroexcavadora y eche todo al suelo, como pasó con un campamento en San Antonio (Nuevo Amanecer)", lamentó la pobladora.
Entre las familias residen niños y adultos mayores, por eso la situación es aún más crítica.
"No vivimos ahí porque queremos, es porque no teníamos otro lugar. Queremos regularizar todo. Sólo le pedimos al municipio un plazo nuevo", dijo la dirigenta Angélica Trincao.
Hasta el momento no hay diálogo
La dirigenta del comité habitacional de la llamada "toma fantasma" Angélica Trincao expuso que hasta ahora no han logrado reunirse con el alcalde Emilio Jorquera para poder exponerle la situación que atraviesan.
"Se supone que nos recibirá el 26 de marzo, pero esa fecha puede ser demasiado tarde para pedirle un nuevo plazo", dijo Trincao.
Diario El Líder ayer intentó obtener una declaración pública por parte del municipio de El Tabo, pero hasta el cierre de esta edición no se obtuvo respuesta formal desde el municipio, entidad que dio la orden de demolición de las 50 casas de la toma de Playas Blancas.
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