La denominada 'Operación Cristal', investigación que partió en enero de este año, arrojó ayer importantes frutos: se decomisó la mayor cantidad de éxtasis registrada en la historia del país. Se trata de 7 mil dosis distribuidas en paquetes plásticos, los que provenían de Holanda y llegaban a través del sistema de encomiendas. Se requisó, además, $640 mil.
Fueron detenidas tres personas: Carlos Salazar Rengifo (25), un colombiano que supuestamente viajaba regularmente a Chile para monitorear el negocio; su ex pareja, Marcela Ramírez Venegas (26) de la misma nacionalidad, quien arrendaba departamentos presuntamente para guardar la droga; y Guillermo García Ferrer, un chileno conocido en la escena electrónica como DJ Memo.
El subprefecto jefe de la Brigada Antinarcóticos de la PDI, Iván Villanueva, explicó a que la banda cambiaba regularmente de departamento para evitar sospechas y que el principal distribuidor sería el chileno, quien organizaba fiestas y aprovechaba de vender el producto. 'Se trata de los mayores abastecedores de éxtasis del país', aseguró.
Pese a la alta cantidad, Villanueva aseguró que los narcotraficantes no se demoraban más que un par de meses en comercializarla. Detalló que a su vez, los colombianos proveían a los distribuidores más pequeños con dosis que iban desde las 20, 50 o 100 pastillas, que eran vendidas a unos $15 mil, es decir, $5 mil más caras que las que se elaboran en lugares más cercanos como Argentina. 'Las que se producen en Sudamérica contienen menos principios activos dentro del comprimido y cuentan con más excipientes, como la glucosa', expresó.
Junto a las 7 mil pastillas se incautaron 105 gramos de éxtasis puro sin comprimir, conocido como MDMA, que se vende en Chile a unos $60 mil el gramo y que, según la PDI, sirve para camuflar la droga en botellas con agua, con el riesgo de que 'menores de edad las consuman pensando que se trata simplemente de agua'. El MDMA en estado puro tiene efectos mucho más duraderos y fuertes que en su versión comprimida: produce una sensación de euforia, de intimidad con el entorno y elimina la timidez.
Villanueva confirmó que la policía continúa con la investigación y que no se descarta la detención de más personas, ya que por el tipo de banda podría tratarse de una organización más amplia.
Tras la incautación, los dos colombianos y el chileno fueron formalizados. Se determinó que queden en prisión preventiva y se fijó un plazo de 100 para investigar. 'Estamos muy satisfechos (...) Todo lo que implique proteger a los jóvenes de este tipo de drogas y sancionar a quienes se dedican a su comercio va en directa protección y beneficio de nuestra sociedad', dijo el fiscal regional metropolitano sur, Raúl Guzmán. J