La incertidumbre que abrumaa los trabajadores de Tecnorec
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'Hasta aquí nomás llegamos'. Esa es la frase que los 60 trabajadores de la empresa Tecnorec, investigada por su supuesta responsabilidad en la contaminación con plomo que afecta a niños de Agua Buena, no quieren que se haga realidad tras el cierre temporal que las autoridades de salud decretaron sobre el funcionamiento de la planta recicladora de baterías.
En la mañana de ayer, un grupo de 30 empleados de la compañía llegó a instalarse frente al edificio de la Gobernación Provincial de San Antonio. Traían un lienzo con el nombre del sindicato: Manuel Rodríguez, y exigían una reunión con la gobernadora provincial Graciela Salazar.
La jefa provincial recibió a los dirigentes y dialogó con ellos por cerca de dos horas. La posibilidad de perder su fuente laboral es la principal preocupación de los trabajadores, pues temen que el proceso que lleva adelante la Superintendencia de Medio Ambiente determine la clausura total de las operaciones de la industria.
Salazar admitió que el Gobierno está consciente de la situación que enfrentan los trabajadores de Tecnorec, por lo que se tomarán, según ella, las medidas que permitan buscar soluciones en conjunto con las autoridades del Ministerio del Trabajo.
'Llegamos a acuerdo con estos trabajadores. El Ministerio del Trabajo se va a reunir con ellos el día jueves acá en la Gobernación, y el viernes nos vamos a reunir en una mesa de diálogo con las vecinas y vecinos que están afectados y en conjunto con los trabajadores', declaró Salazar tras la cita con los dirigentes sindicales.
Miguel Moya, presidente del Sindicato Manuel Rodríguez, recalcó que le pidieron a Salazar que el Gobierno les apoye frente a los escenarios eventuales que surgirán luego que los tribunales ambientales emitan su veredicto final.
'Somos cerca de 60 personas, estamos apelando a la Inspección del Trabajo, a la Seremi de Medio Ambiente, que también nos dé una respuesta, porque nosotros tampoco estamos apoyando a la empresa; nosotros no queremos hacerle daño a nadie, solamente estamos protegiendo nuestros puestos de trabajo. Entendemos la postura de la gente, porque todos los que estamos acá somos padres de familia', declaró Moya.
'Yo voy a dejar bien en claro, yo doy la cara ahora porque si nosotros estamos perjudicando a la gente de Agua Buena, yo voy a ser el primero que le voy a poner el candado a la empresa', dijo el timonel.
Moya destacó que Tecnorec es una empresa pionera en reciclaje de baterías, factor que, según él, debe ser considerado por las autoridades.
El dirigente afirmó que la empresa, mediante la Asociación Chilena de Seguridad, cada seis meses les realiza exámenes de sangre a sus operarios para determinar el nivel de plomo que estos presentan.
Luego de reunirse con la gobernadora, los trabajadores se trasladaron hasta el edificio de la Intendencia en Valparaíso, para solicitar un encuentro con la seremi de Salud, María Graciela Astudillo.
Julio Acevedo, quien hace cinco años trabaja en Tecnorec, abogó porque la voz de los trabajadores sea escuchada en medio de este conflic to, pues detrás de cada operario hay una familia que depende de esta fuente laboral.
'Estamos tranquilos porque nosotros, dentro de la empresa, hacemos las cosas bien y como corresponde', dijo Acevedo, quien aseguró que Tecnorec toma las medidas necesarias para cuidar a sus trabajadores y para no contaminar.
'Recordemos que Tecnorec tiene una certificación ISO; aparte de eso la empresa cuenta con una estación de monitoreo que está instalada dentro de la comunidad, que se encarga de realizar las mediciones que corresponden a la calidad del aire y esos resultados están a la mano de cualquier autoridad', sostuvo Julio Acevedo.
Los trabajadores y dirigentes esperan reunirse hoy con el alcalde Omar Vera para exponerle detalles de su situación. J
l Jessica Ferrada es dueña de una microempresa que presta servicios de alimentación en Tecnorec y ayer se mostró preocupada por el posible cierre de la planta de Agua Buena.