Descartan envenenamiento de palmeras de Playa Grande
El color amarillento que están tomando las nuevas palmeras de la Playa Grande de Cartagena causó preocupación en el balneario. Los trabajadores que pasan gran parte del día en la terraza, desmintieron los rumores que decían que los nuevos árboles habían sido envenenados y aseguraron que todo ha estado normal. Sin embargo, no pueden asegurar que algún mala leche haya causado algún daño a las palmeras.
"No hemos visto nada raro. Quedaron súper bonitas y sería una lástima que alguien las quisiera secar", comentó Miguel Godoy, un dedicado garzón que lleva más de una década atendiendo en distintos restaurantes de la Playa Grande.
La preocupación partió a mediados de semana, cuando algunas hojas comenzaron a secarse y a tomar un aspecto amarillo.
"Es normal que cuando usted planta algo se seque un poco y se le caigan algunas hojas", comentó una de las vendedoras, quien aseguró que están esperando con ansias que terminen las obras de mejoramiento para tener un nuevo puesto.
"Se puede ver que están saliendo los brotes nuevos, las riegan todos los días. Están vivitas", comentó otra.
Las 25 palmeras fueron instaladas en noviembre pasado como parte de un proyecto de renovación de la terraza de la Playa Grande. El plan, que contempla un costo cercano a los $200 millones, incluye nuevo alumbrado público, pavimentación y la renovación de los puestos de comerciantes.
"Es lo que le hacía falta, una renovación. Cuando todo esto esté terminado va a quedar muy bonito", agregó Miguel Godoy, quien estaba en medio de la terraza invitando a los turistas a disfrutar de las preparaciones del Montermar.
Ahora, sólo queda esperar el crecimiento y renovación natural de las palmeras, y como dice el Chapulín Colorado: "Que no panda el cúnico". J
