Los familiares del anciano de 82 años asesinado el lunes asistieron ayer a la audiencia de formalización contra el acusado de homicidio y no resistieron lo que oían. Incluso salieron de la sala para respirar profundo porque lo que relataba el fiscal era intolerable para ellos.
"Se ensañó con mi papá, le pegó a más no poder a un hombre indefenso", dijo acongojado el hijo de Eduardo Segundo Mejías Mejías, la víctima de asesinato.
Ayer en la audiencia realizada en el Juzgado de Garantía se revelaron crudos detalles del homicidio del adulto mayor y de como el acusado, René Soto Fuentealba (32), actuó fríamente.
El fiscal Álvaro Pérez relató a la juez de garantía como René Soto le propinó a su víctima al menos 12 heridas en la cabeza, brazos y espalda. Varias de éstas se trataban de puñaladas que le propinó en la cara y el cuello. Dos eran cortes de hasta 19 centímetros que por poco le cercenaron la cabeza.
"Cómo pudo hacer algo así con él, si era un anciano que no podía defenderse, nos da una impotencia tremenda", expresó Eduardo Mejías hijo.
Mientras se relataban los hechos el acusado mantuvo baja la mirada y en ningún momento observó a la familia del occiso.
Según detalló el fiscal, tras cometer el crimen el imputado registro la vivienda del abuelo, ubicada en la Parcela 8 de Quillaycillo.
Desde la casa desaparecieron especies de valor y dinero en efectivo que bordearía los 4 millones de pesos.
Carrete
Tras cometer el brutal crimen el sujeto se fue hasta su casa, que está contigua a la de su víctima, se duchó y salió a una fiesta.
El hombre se reunió con un grupo de personas y estuvieron bebiendo alcohol hasta altas horas de la madrugada. Según testigos René Soto compró todo el licor que bebieron en ese encuentro.
Al día siguiente del "carrete" fue con un amigo hasta un cementerio para visitar una tumba y ahí quiso confesar.
"El hombre pide un teléfono y llama a su patrón para decirle lo que había hecho", explicó el fiscal Pérez.
El sujeto se entregó en Carabineros de El Tabo el martes pasado, donde confesó haber asesinado a su vecino. Sin embargo y pese a las pruebas que existen en su contra aún no ha reconocido que sustrajo dinero y especies desde la vivienda del occiso. J
l Tras la formalización se dictó prisión preventiva para René Soto Fuentealba, la cual se extenderá por los 120 días que dure la investigación.
"Se trata de un delito bastante grave con penas altas y por ello se impuso la prisión preventiva, porque la magistrado encontró que el imputado es un peligro para la seguridad de la sociedad. Como Ministerio Público planteamos la teoría de robo con homicidio", explicó el fiscal a cargo del caso, Álvaro Pérez.
El hijo del occiso, Eduardo Mejías, expresó que "uno nunca va a tener conformidad pese a que haya justicia".
