l Jorge y otros 15 compañeros supervisores participaron ayer de una capacitación sobre liderazgo y trabajo en equipo para los supervisores de Puerto Central. "Todo lo que ayude para actuar en el trabajo y en lo personal con responsabilidad es bienvenido", dijo Gyllen.
Jorge Gyllen es uno de los hombres enamorados del puerto. Con más de 22 años trabajando en todos los puestos posibles y en la mayoría de las empresas del sector, hoy cumple un doble rol en Puerto Central: supervisor y secretario del sindicato Muellaje Central 1.
"Soy una de las personas a las que seduce el puerto, mis compañeros lo saben. Trabajamos al aire libre, no encerrados en cuatro paredes y, lo más gratificante es saber que haces algo distinto al resto", cuenta Gyllen.
"Partí en esto como movilizador, como todos y después fui tarjador, internador y casi todos los puestos del puerto. En esa época, los viejos enseñaban, pero era súper cerrado el sistema. Yo igual entré por el papá de un amigo que me ayudó un montón", reconoce el hombre.
A pesar de la alegría que le da el trabajo en el puerto, Gyllen reconoce que "es un tema que te quita mucho tiempo en relación a la familia, porque hay que estar disponible los 365 días del año y cuando eres eventual no tienes vacaciones ni nada", afirma Jorge con la voz más ronca y la mirada un poco triste. Pero de inmediato se repone al hablar de los logros de sus hijos y de sus nietos.
"Aunque se pueda perder mucho, tengo la gratificación de que mis dos hijos siguieron estudiando. Mi hijo es ingeniero recibido y mi hija está terminando auditoría, aunque tuvo que parar por mis nietos", explica Jorge.
Hace cuatros años que este vecino de Mirador del Pacífico está soltero y vive acompañado de su hija y sus dos nietos mellizos. "Estoy chocho, pero algunos días me toca cuidarlos y quedo chato, porque quieren conocer todo. Igual me ayuda mi mamá que vino de visita hace como cuatro meses", dice en broma.
Gyllen reconoce que siempre lo social le llamó la atención. "Uno ve las situaciones donde se ve desigualdades y ahora, gracias a Dios, puedo desarrollarme haciendo las dos cosas", explica el hombre.
Después de trabajar por más de 20 años como eventual, en septiembre Gyllen pasó a ser uno de los contratados por Puerto Central y un mes después asumió como líder sindical. J