El secreto del rico sabor del mítico "Puchos Lacios"
Comida preparada con cariño y amor, sumado a una atención digna de un rey. Esos son los atributos que vuelven al restaurante del Círculo de Carabineros en Retiro (conocido por la gente como "Los Puchos Lacios"), en uno de los lugares más frecuentados por los habitantes de Llolleo, o al menos eso es lo que aseguran sus locatarios.
Con alrededor de 53 años de funcionamiento, siendo su aniversario el próximo 11 de diciembre, este local ha sido un punto de encuentro tanto para carabineros retirados, como para muchas familias que desean comer alguna de sus sabrosas empanadas o su famosísimo pescado frito.
Aunque el establecimiento es propiedad del Círculo de Carabineros, la concesión está a cargo de una sola familia del sector. Luis Allende Lizana es el actual encargado del recinto y trabaja en conjunto con su hermano Juan Carlos, quien sirve los platos y los tragos a los clientes. Isabel, la otra hermana, prepara las recetas en la cocina.
"Nosotros llevamos 32 años en este local, cuando el concesionario era mi padre, que después se lo heredó a mi hermano Luis. Más que nada la gente nos prefiere porque les gusta como atendemos en el local, cosa que hizo que el directorio de Carabineros nos tuviera confianza y nos permitieran seguir con la licencia del local", manifiesta Juan Carlos.
-Ese nombre se lo colocaron los colectiveros de aquí hace muchos años.
-Antiguamente, 33 años atrás, a los funcionarios de los carabineros en retiro les pagaban acá. Entonces venía gente de Algarrobo hasta Rapel a recibir sus sueldos. Los pagadores del Banco Estado llegaban a las cuatro de la tarde aquí. Y los viejitos estaban desde las nueve de la mañana.
-Entonces, como en esa época los viejos jubilados eran viejos, viejos, se paraban afuera al sol. Así, alguien de la locomoción dijo "mira, ahí están los viejos puchos lacios".
-Así fue como nació el apodo. Ahora ese es un nombre de fantasía porque el nombre de Círculo de Carabineros aún se mantiene, pero igual todos le dicen así Puchos Lacios.
El Secreto
Para Luis Allende, una de las cosas que caracteriza su negocio es la tranquilidad del ambiente, ya que, según sus palabras, dentro del local no se ha presentado ninguna pelea o asalto.
"Nosotros no hemos tenido ningún problema. Yo soy muy bien estricto, porque si veo que alguien viene armando pelea o llegan borrachos, yo no los dejo entrar. Este es un ambiente tranquilo para la gente", expone.
-Más que nada, la tranquilidad del ambiente y porque atendemos bien. Además los precios que ofrecemos no son altos. Siempre los hacemos muy económicos para la gente. J
l Luis Allende expone que otras de las razones por la que el local ha perdurado mucho tiempo en la provincia, es que muchas de las generaciones de carabineros en retiro van con sus familias y parientes a comer a este mítico local.
"Nosotros hemos recibido muchas recomendaciones de varias personas que venían aquí de niños, o de carabineros antiguos que vienen con sus familias. Son muchas las generaciones que han pasado por este local, porque aparte es un club social", sostiene.
