Ex presos políticos protagonizan protesta con huelga de hambre
Una huelga de hambre protagoniza un grupo de ex presos políticos de San Antonio en demanda de una serie de mejoras para quienes sufrieron represión durante la dictadura.
Luis Barrera, Ema Cabezas y Donato Zavala tomaron la medida extrema como una forma de llamar la atención ante su problemática, después de lo que ellos califican, como el nulo avance en las conversaciones con las autoridades de gobierno.
Pedro Araya y Ramón Calderón, directores de la Agrupación de ex Presos Políticos de San Antonio, comentaron a Diario El Líder que las principales demandas de este movimiento que tiene réplicas a nivel nacional son tres:
"Lo primero dice relación con retomar la mesa de trabajo con el gobierno -comenta Pedro Araya- la que fue establecida para lograr soluciones para quienes sufrieron en dictadura".
Ramón Calderón acotó que el 9 de diciembre del año pasado con la ministra Secretaria General de la Presidencia, Ximena Rincón, una instancia para llegar a acuerdos. "Pero desde esa fecha nunca más supimos de ella. Ni siquiera un llamado telefónico. No se avanzó nada".
Araya contó que además se espera tener novedades en cuanto a la reclamación de homologar las pensiones que se reciben por la Ley Valech y por la Ley Rettig.
"Hay una serie de diferencias y muchos de nuestros asociados no tienen la información respectiva para elegir por una u otra", dijo.
Y el tercer punto tiene que ver con la reapertura de la Ley Valech para que personas que no se integraron en su momento, lo hagan ahora.
Calderón comentó que "San Antonio es una de las organizaciones que tiene más ex presos y exonerados políticos del país, pero en su momento muchos no se sumaron a esta iniciativa por miedo y por desconocimiento", dijo Calderón.
"Esperamos establecer un mecanismo permanente para que el Estado reciba las denuncias por violaciones a los derechos humanos, investigue y someta a juicio a los victimarios, califique, repare, rehabilite, indemnice a las víctimas y sus familias".
Los dirigentes comentaron que "no queríamos esta medida de presión extrema, considerando la edad de los compañeros y compañeras ex presos políticos. Estamos dispuestos a ella porque a nosotros no sólo se nos acaba el tiempo político, también se nos acaba el tiempo de vida, como a todos los pensionados de Chile", declararon. J

