"Mientras no se trabaje con los profesores en la elaboración de un proyecto de ley cualquier intento por mejorar la calidad de la educación será en vano".
El presidente del colegio de profesores de la provincia de San Antonio, Oscar Abarca, no está para nada contento con el proyecto de ley de la nueva Carrera Docente, que hace algunos días fue enviado a la Comisión de Educación de la Cámara Baja del Congreso Nacional.
La iniciativa contó con el respaldo de diputados, senadores y de expertos en educación, sin embargo, la crítica surgió a través del magisterio. El descontento con la propuesta, incluso, llevó a que el presidente nacional del Colegio de Profesores, Jaime Gajardo, no asistiera a la firma protocolar del proyecto, y en San Antonio se respaldó el actuar del timonel del gremio.
"Nuestro Gobierno, al cual nosotros elegimos, está legislando a escondidas. Ellos elaboraron un proyecto sin la participación del profesorado. Me parece que eso no es lo correcto si queremos mejorar la calidad de la educación", dijo Abarca.
El documento, que fue firmado por la Presidenta Michelle Bachelet, incluye la formación de los profesores, ingreso a la docencia, las condiciones del ejercicio y el desarrollo y la desvinculación. Además, se estima que el sueldo de un docente se verá incrementado en un 28 por ciento, por lo que un profesor con un contrato de 44 horas semanales percibirá a fin de mes $950 mil, $330 mil más que en la actualidad.
Es por ello que la inversión que estima el Ministerio de Educación bordearía los 2.300 millones de dólares en este nuevo plan de educación, pero Abarca advierte que "con este nuevo proyecto de Carrera Docente se perderán algunos beneficios".
"Se eliminan los actuales bonos de perfeccionamiento, entregados a cada profesor que acredita ciertas horas de perfeccionamiento, y el de experiencia, que se entrega cada dos años", explica Abarca. J