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Encuentran a abuelita fallecida en su casa

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l Conmoción existía ayer en Placilla, luego del hallazgo de una persona fallecida al interior de un inmueble ubicado en calle Blanco número 590.

Según antecedentes aportados por la Brigada de Homicidios (BH) de la PDI de San Antonio, la mujer de 88 años, identificada como María Páez Rojas, padecía de varias enfermedades, las cuales la mantenían postrada hace diez años.

"La abuelita padecía varias enfermedades propias de su edad. Ella estaba en muy buenas condiciones, ya que el matrimonio que vive en el mismo sitio y que se hizo cargo de ella, siempre se preocupó de la abuelita", explicó el jefe de la BH, Víctor Quintanilla.

El hallazgo se produjo en horas de la tarde, cuando el matrimonio fue a ver a María, quien estaba fallecida.

La autopsia será quién determinará las razones por las cuales falleció María, aunque la BH descartó la participación de terceras personas en el deceso de esta vecina de Placilla.

Por orden del fiscal de turno, la BH se hizo cargo de la investigación. J

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Pesar por muerte de ex administradora de cementerio

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Cuando Mercedes Alvarez Vera (61) fue diagnosticada con cáncer, Hernán Pacheco, su marido, dejó de lado todas sus obligaciones y se dedicó ciento por ciento al cuidado de su mujer.

Su enfermedad fue un duro golpe para su familia, en especial para sus hijos Rodolfo, Gladys, Ana María, Jaime y Daissy, quienes siempre han sido muy unidos a sus padres.

"Ella era una mujer ejemplar. Buena esposa y muy buena mamá, lo cual se ve reflejado en el amor que sus cinco hijos sienten por ella, por eso cuando le diagnosticaron la enfermedad, dejé de lado todo y me dediqué a cuidarla tal como ella lo había hecho con nosotros durante todos estos años", cuenta Hernán.

Fueron varios meses de lucha, pero lamentablemente esta maldita enfermedad le ganó la batalla a esta querida vecina de Villa Italia, quien por años, se desempeñó como administradora del Cementerio Parroquial de San Antonio.

"Le gustaba mucho lo que hacía y siempre trataba de ayudar a quienes se lo pedían. Siempre estuvo dispuesta a colaborar con los demás, por eso cuando ingresó a este trabajo en el año 1992 trató de hacerlo lo mejor posible y así fue", recuerda Hernán.

"Nunca le gustó ostentar de su cargo, muy por el contrario, siempre fue una más. Mi mujer era muy humana por eso se ganó el cariño de tanta gente. Siempre que alguien necesitaba sepultar a un familiar, pero no tenía dinero, ella se las ingeniaba para poder ayudarlo", agrega su marido.

Para Mercedes, su familia era lo más importante de este mundo, por eso cuando recién empezó a trabajar, instaló en su casa una oficina de contabilidad junto a su marido.

"Ella no quería separarse de los niños que llegaron bien seguidos, por eso decidimos trabajar desde la casa. Mercedes era una mujer muy buena que nunca descuidó sus obligaciones ni a su familia", recalca.

Mercedes siempre estuvo muy ligada a la iglesia.

"Era una mujer muy católica. Todas las noches, antes de dormir, leía la Biblia. Iba a misa todos los domingos y antes de su enfermedad, visitaba a su madre todos los días...era muy mujer excepcional", dice Hernán, con algo de tristeza.

funeral

Los restos de Mercedes serán sepultados al mediodía de hoy en el cementerio Parque del Sendero, de Llolleo, luego de una misa oficiada, en la capilla Santa Rita de Cassia, por el sacerdote Pedro Tapia, quien es muy cercano a la familia Pacheco Alvarez. J

l Hernán Pacheco reconoce en su compañera de vida a una mujer ejemplar, pero sobre todo muy humana.

"Mercedes era el motor de su casa, por eso sus hijos sienten un amor tan grande por ella. Siempre les inculcó valores. Fue una bonita mujer y en estos 40 años que estuvimos juntos puedo decir que fuimos muy felices", recalca.

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