A fines de marzo pasado la Municipalidad de San Antonio decidió poner término anticipado al contrato con la empresa española Corsan Corviam, que ejecutaba las obras de construcción del nuevo puente de Llollito y la pavimentación de las calles Portales y O'Higgins.
Según el alcalde Omar Vera, Corsan Corviam habría incumplido las bases de la licitación y además "perdió la certificación de parte del Ministerio de Vivienda y Urbanismo para ejecutar trabajos de pavimentación", razones que llevaron al municipio a terminar el contrato.
Eduardo Pastén, encargado regional de la Subsecretaría de Desarrollo Regional (Subdere, entidad que financia el proyecto), agrega otro dato. "La razón principal para poner fin al contrato fue que la empresa Cosan Corviam no estaba cumpliendo con los plazos. En 144 días de obras, sólo se registró un avance físico de 4,4% en circunstancias que el proyecto total debía terminarlo en poco más de 300 días".
Después de un mes y medio de paralización, los trabajos se reanudarán dentro de los próximos 15 días. De acuerdo a lo informado por el alcalde Vera, esta vez el municipio entregó las obras a la empresa chilena San Martino, que había quedado en segundo lugar en el proceso de licitación.
NO HAY PÉRDIDAS
"Sólo falta un detalle administrativo por finiquitar, pero creemos que durante la próxima semana podríamos estar entregando el terreno para que las obras se retomen en el más breve plazo posible", admitió Omar Vera, quien aclaró que el término del contrato no significó una pérdida de recursos ni para el municipio ni para el Estado, pues no se alcanzaron a realizar pagos a la compañía española.
"Estamos muy satisfechos con la reanudación, porque esta es una de las obras viales que está ejecutando la Subdere no sólo a nivel regional, sino de todo el país. Para San Antonio será una importante vía de conexión entre Llolleo y Barrancas", agregó el edil.
Eduardo Pastén, por su parte, informó que la Subdere destinó 3.260 millones de pesos para la ejecución de este proyecto, que debería estar concluido en 340 días. O sea, las autoridades estarían cortando la cinta en mayo del próximo año.
Los trabajos contemplan la construcción de un nuevo y moderno puente de dos pistas, además de la pavimentación de las calles Portales (desde Echaurren hasta el puente) y O'Higgins (desde el puente hasta Pablo Neruda). J