Farkas sorprendió a tabino con millonaria donación
Juan Recabarren no podía creer lo que escuchaba del otro lado de teléfono: el empresario Leonardo Farkas lo estaba buscando para depositarle cinco millones de pesos y premiarlo así por su labor solidaria. Pensó que era una broma. Que no se trataba del empresario de cabellos dorados y optó por la incredulidad, pero con el paso de las horas comenzó a cambiar de parecer.
El famoso hombre orquesta anunció a primera hora de ayer que el autodenominado "Farkas de los pobres" se había hecho ganador de un millonario aporte como reconocimiento a su permanente ayuda a los más desposeídos.
"Díganle a mi 'colega', el filántropo Juan Recabarren dónde le deposito los 5 millones de pesos para que siga ayudando a los más necesitados de Chile (…) Yo empecé con el mismo auto, acarreando mis instrumentos musicales y el mío también pasaba en pana y mucha veces pedí ayuda para empujar", escribió Farkas la mañana de ayer luego de ver una nota en Chilevisión Noticias que registraba la conmovedora historia del tabino.
"Yo no quiero plata. No es que tenga, pero con mi esfuerzo me basta para vivir. Lo único que me gustaría mucho, en todo caso, es arreglar mi furgón. Se le fundió el motor en una subida de Cartagena y ahora no tengo cómo salir a dar comida", dijo el hombre beneficiado por el empresario minero.
-Cierto. Con eso le podría pagar la comida a la gente que está en la calle en San Antonio por unos buenos años.
puro esfuerzo
Juan Recabarren, feriante y voluntario de la Segunda Compañía de Bomberos de Las Cruces, ha dedicado su vida a ayudar a los demás. Padre de tres hijos, fue abandonado por su mujer cuando el más pequeño tenía solo seis meses. Antes de eso había tenido que vivir en la calle y vender helados en las micros para subsistir. Sabía lo que era el esfuerzo y se convirtió en papá y mamá.
"Me gusta ayudar a los demás, me voy a morir en esta. Sé bien todo esto, porque dormí debajo de los puentes, pasé frío y hambre como la gente que ahora ayudo", cuenta.
"El Farkas de los pobres" se hizo famoso en la zona por entregar alimentos a los indigentes que viven en la calle. El verano recién pasado se cuadró con un gran pastel de choclo, y en lo que va del invierno ya se ha puesto en dos oportunidades con cocimiento para las personas que viven en la abandonada estación de trenes de San Antonio. J