Al cielo se fue el pintor que retrataba al puerto
Multifacético, extrovertido, medio loco y muy amable. Un señor de la pintura, un maestro de la restauración artística, pintor amante del puerto de San Antonio. Sociable, fanático de Eduardo Frei (padre e hijo) e hincha de Michelle Bachelet. Apegado a la religión católica, apasionado amigo y abuelo querendón, fiel esposo y eterno compañero de la mujer que lo siguió hasta sus últimos días. De vestir elegante, incansable usuario de boinas. Sólido, único.
Todos esos rasgos y muchos más son los que afloran en quienes ayer recordaron la figura del pintor Juan Adalberto Agüero Buznoza, que falleció la noche del jueves a la edad de 89 años. Una neumonía lo aniquiló en menos de una semana. Su pincel de creatividad inagotable se fue con él a pintar la paz en el cielo.
Nacido el 26 de julio de 1926 en Osorno, Juan Agüero llegó a San Antonio en el año 1988. Venía para restaurar 14 frescos en la Parroquia de Llolleo.
"Fue en 1989 cuando nos conocimos en la casa de un matrimonio de amigos; todos hablaban de él porque siempre fue loquito, era muy expresivo. A partir de ese momento no nos separamos más", contó ayer su esposa Patricia Díaz Portugués, de 70 años.
La pareja se casó en el año 92 y se radicó en Santiago. Volverían a San Antonio en 1999 porque Patricia tenía a toda su familia en cerro Alegre, en la calle Hermanos Carrera 450.
"Él recorrió el mundo, estuvo restaurando muebles en La Moneda y en catedrales de Santiago. Era muy reconocido por su trabajo, tenía una sensibilidad especial y era muy generoso y bueno con toda la gente", agregó su mujer.
En el mismo hogar que compartió con su mujer, Agüero instaló su taller. Desde ahí se dedicó a pintar el puerto, la caleta y el mar. "Todos los días se levantaba, me llevaba un café a la cama y después me contaba cuántos barcos había en el puerto; el amaba San Antonio", dijo su esposa al confesar que lo extrañará hasta la muerte.
Antes de casarse con Patricia Díaz, Juan Agüero tuvo cinco hijos de una relación anterior: Mónica, Claudio, Juan Carlos, Flavio y David son sus herederos y quienes, fuera de San Antonio, se enteraron de la partida de su padre. J
En 1951, Juan Agüero cursó estudios de Bachiller en la Real Academia de Italia, donde se especializó en artes plásticas y restauración. A partir de esa época recorrió distintas ciudades del mundo para aplicar sus conocimientos y restaurar obras pictóricas y muebles antiguos en parroquias, capillas, teatros, conventos y murales.