SAU 3 - Mejillones 1 El sufrimiento es parte de este San Antonio Unido
San Antonio Unido ganó. Eso es lo rescatable, pero otra vez el equipo lila dejó dudas, mostró vacíos en su juego y sembró incertidumbre. El 3 a 1 sobre Mejillones en el estadio Municipal por la décima fecha parece en el papel un resultado holgado.
No fue así. Por el contrario para dejar los tres puntos en casa se sufrió y si no es por Rodrigo Paillaqueo, quien se mandó un doble tapadón a dos minutos del final, el crecido visitante empataba el compromiso por la décima fecha.
La tranquilidad llegó recién en el primer minuto de adición, con el tanto de Lucas Triviño. El segundo del plantense en su regreso a la titularidad en este campeonato.
Las tres unidades que se lograron dejan encendido el campeonato, porque La Pintana empató sin goles con Lota en Coronel. El SAU quedó a dos unidades de los capitalinos y el próximo sábado chocarán en el sur de Santiago.
El partido pudo ser de trámite fácil para el elenco de Jorge Miranda (quien fue cuestionado por hinchas con letreros que pedían su salida). El SAU salió con todo y antes del minuto se creó dos ocasiones. Nahuel Donadell dirigía los hilos como enganche, el puesto donde se siente cómodo y precisamente de sus pies salieron perfectas habilitaciones para Lucas y Maximiliano Alaniz.
El equipo se veía dinámico, corriendo todas las pelotas y presionando arriba. En los 9' el "Maxi" apretó la salida, recuperó, cedió para Nahuel, y el mendocino le puso la pelota al juvenil Byron Bustamante (otro debutante en este torneo) para que abriera la cuenta. Fue el primer gol del canterano en el fútbol profesional.
Todo lo bueno que mostró el SAU en esos minutos iniciales de a poco de fue diluyendo. Mejillones no hacía mucho por dar vuelta el marcador. Defendía con dos líneas de 4 y dejaba un referente en el área (Pizarro o Durán) para recibir los pelotazos que lanzaban desde el fondo.
En vez de aprovechar la timidez de la visita y amarrar el partido, el elenco lila se enredó, cayó en el juego parsimonioso y sin profundidad. El partido no tenía intensidad, ni emoción; menos ocasiones de gol.
Después del tanto de Byron tuvieron que pasar 25' para que el local se aproximara al arco del gigante Nieves (medía como dos metros). Lucas cedió para Nahuel y el pequeño mendocino demoró mucho la definición.
Mejillones despertó en el final de la primera parte y encerró al SAU en su zona. Se creyeron el cuento y en la segunda parte salieron a igualar el partido.
José Durán estuvo a punto de igualar en los 55'.
San Antonio no se encontraba. Ya no aparecía Nahuel y Triviño se veía frustrado. No le llegaba ni una arriba.
El partido se complicaba, Mejillones estaba cerca de emparejar. Jorge Miranda se dio cuenta y le dio frescura al ataque con el ingreso del quisqueño Sebastián Reyes. De sus pies salió el centro que conectó Triviño para anotar el 2-0. El tanto del argentino no fue el de la tranquilidad. Por el contrario.
Los ingresos de Emerson Jorquera y Dinko Araya cambiaron el trámite del partido. Mejillones se tornó en el dominador, encerró al SAU en su zona, no lo dejaba salir.
De un pelotazo largo que nadie despejó llegó el 2-1 de Araya, en los 74'. Esa ley no escrita del fútbol que dice que el 2-0 es peligroso se cumplió. Mejillones se envalentonó y se fue en busca del empate. Si no es por Paillaqueo el final hubiese sido otro.
La expulsión de Pizarro en los 81' apaciguó un poco la presión. Luego el gol de Triviño en los descuentos relajó un poco a los hinchas, que se fueron contentos por el triunfo, pero no por el juego. J
El SAU llegó a 18 puntos y quedó a dos unidades de La Pintana que ayer empató sin goles con Lota Schwager en Coronel.
