René Meléndez Plaza, la zurda bendita de Cuncumén, que brilla en el Mundial Sub 17
Ahí estaba. Sentado en el banco de suplentes esperando su oportunidad. El Estadio Nacional era el anfiteatro donde una camada de jóvenes buscaba cumplir su sueño: jugar por primera vez un mundial de fútbol. Y entre ellos, un sanantonino sacaba la cara por la comuna puerto.
Chile es el organizador de esta cita planetaria que reúne a los mejores jugadores del mundo en la categoría Sub 17, y por lo mismo, el sábado, todas las miradas se concentraron en el coliseo ñuñoíno.
Hinchas, familiares y representantes de los clubes más importantes de Europa estaban sentados en el recinto donde La Roja se consagró Campeón de América. Ahora la historia la comenzó a escribir un grupo de muchachos con sed de triunfo y que son dirigidos por Miguel Ponce, quien busca borrar la pésima imagen que dejó el DT argentino Alfredo Grelak en el Sudamericano Sub 17 que se realizó en Paraguay este año, y en donde "La Rojita" perdió todos sus partidos.
Pero el sábado se dio inicio a otro proceso. 25 mil espectadores llegaron a apoyar a esta nueva generación de futbolistas. Los televisores, en su mayoría, se encendieron para ver el debut de los 21 guerreros de Ponce.
Eran las 20 horas en punto y Chile decía presente en una nueva fiesta del fútbol. Sin embargo, las cosas no empezaron bien para los locales. A los 3 minutos abandonó el campo de juego Fabián Monilla por una lesión en su tobillo. 4' más tarde, una desinteligencia en la defensa permitió el 1-0 de los croatas, que, a los 31', no soportaron los embates de los chilenos.
El 1-1 y todo Chile gritaba el gol de Yerko Leiva. La banca de "La Rojita" se levantaba por completo para celebrar y entre todos ellos asomaba el sanantonino René Antonio Meléndez Plaza. Un chico de 16 años, tranquilo, quizás algo tímido, regalón de su familia y un amante de las cazuelas, como lo reveló su madre Andrea Plaza (35).
"Siempre ha sido muy tranquilo. No le gustan las fiesta y prefiere estar acá en el campo con su familia o amigos jugando Play Station", dijo Andrea.
La historia de este muchacho, que hoy juega de volante en la selección de Miguel Ponce, comienza en la localidad rural de Cuncumén. Una zona campestre, calurosa y en donde el vecino más cercano está a varios kilómetros. Allí este talentoso jugador comenzó a dar sus primeros pasos acompañado de una pelotita.
"Lo único que le gustaba era jugar fútbol. Desde que era un niño siempre pedía un balón y pasaba todo el día chuteando", explicó ayer su madre cuando llegó desde Santiago a su natal pueblito.
DEBUT DE UN ZURDO
Fin del primer tiempo y Chile se iba al descanso empatando y exhibiendo un buen juego. No había nada que reprocharles a estos jóvenes muchachos.
En las tribunas del estadio, Andrea junto a su marido, René Meléndez Gómez, se relajaban.
"Estuvimos nerviosos todo el primer tiempo, incluso, cuando mi hijo estaba en la banca", dijo la orgullosa madre.
Los dos elencos ya estaban en el césped del Nacional para comenzar con la segunda fracción del encuentro, válido por el Grupo A del Mundial Sub17.
Los nervios, otra vez, se apoderaron de los padres del zurdo de Cuncumén, quien a los 68 minutos fue llamado por el ayudante técnico de Ponce para que ingresara al campo de juego.
"Ahí nos pusimos más nerviosos. Pero estábamos felices, porque él se lo merecía. Ha hecho un gran esfuerzo para llegar a donde está y él es consciente que si quiere llegar lejos deberá esforzarse mucho más", agregó Andrea.
Y es que la corta vida del volante de Audax Italiano no ha sido nada de fácil, pese al incondicional apoyo brindado por sus padres.
Desde muy pequeño que mostró condiciones para el fútbol. Independiente de Cuncumén fue el primer equipo en el cual jugó.
"Siempre mostró muchas condiciones para el fútbol. Lo venían a buscar de distintos clubes para que fuese a jugar", recordó Plaza.
Es por ello que su progenitor decidió llevarlo hasta Deportes Melipilla para que probara suerte, cuando apenas tenía 11 años.
"Yo siempre quise ser futbolista y por distintas razones no llegué a serlo. A lo mejor por falta de apoyo, quizás. Es por eso que todos hemos apoyado a mi hijo para que cumpla su sueño y cuando lo vi en cancha la emoción fue muy grande", describió Meléndez Gómez antes de saltar, sagradamente, a alguna cancha de Melipilla, donde cada domingo juega al fútbol con sus amigos.
Después de un tiempo en Melipilla, había que pensar en grande. René hijo maravillaba a todos con su zurda y hablando por aquí y por allá, llegó un día a La Florida para probarse en el Audax Italiano.
"Nos empezamos a mover para que llegara un equipo importante. Habíamos pensado en Colo Colo, pero no se dieron las cosas, así que nos fuimos al Audax. Gracias a un amigo que trabaja allá, fuimos a las pruebas los días indicados", detalló.
Ese amigo es Georgelino Osorio, uno de los entrenadores de las series juveniles del equipo de colonia.
"Bien merecido tiene su puesto en la selección. Personalmente, me tocó ver muy de cerca el enorme esfuerzo de René y me alegra y emociona verlo debutar en este mundial", dijo el también jugador del Cóndor.
A LA MEDIANOCHE
René Meléndez llegó a los 13 años a probar suerte a Audax Italiano. Estuvo cinco meses a prueba luchando por convencer a su entrenador.
"Estuvo todo un año viajando desde Cuncumén a La Florida para entrenar. Que recuerde, solo faltó una sola vez. A veces uno no le toma el peso a las cosas, pero para un niño viajar todos los días desde Cuncumén a Santiago es muy sacrificado y cansador. René es muy apegado a su familia y le costó mucho alejarse de ellos, como a todo niño, pero él tiene las cosas muy claras, por algo está dónde está", recalca Osorio.
Su madre cuenta que "en el colegio le daban permiso para que se fuera a entrenar a Santiago. Estaba hasta muy tarde allá y llegaba a Cuncumén como a las 12 de la noche. Al otro día de vuelta a lo mismo. Por eso estoy tan feliz de verlo jugar en la selección, porque su sacrificio está dando sus frutos".
"El negro" reveló que Meléndez, en un principio, no convencía al DT de la categoría Carlos Ganga.
"Luego de los cinco meses que estuvo a prueba, el club decidió jugársela por René y fue una decisión correcta. Ha demostrado mucha categoría, sobre todo, porque es un volante completo: puede jugar de contención, de salida y por las bandas. Además tiene una muy buena técnica", desglosó.
Luego del voto de confianza que le entregó el cuadro itálico, Meléndez comenzó a vivir cada entrenamiento de la forma más profesional posible. Tan así fue que pasó a ser integrante de la Legión de Talentos del club.
"Cuando el jugador está dentro de esta categoría, este pasa a ser una preocupación importante del club. Se le entrega educación, pensión y se le prepara sicológicamente. Esto fue cuando él tenía 15 años. Luego pasó a la Escuadra de Diamante, que son los esparring del primer equipo, es decir, son los mejores juveniles del Audax", detalló.
COPA CHILE
La sacrificada carrera de este jugador sanantonino, acompañado de un enorme talento, ha tenido sus premios. En la reciente edición de la Copa Chile, René Meléndez debutó en el primer equipo. Primero fue en el triunfo ante Magallanes y luego en la victoria ante la Universidad Católica.
Actualmente Meléndez pertenece al selecto grupo de jugadores exportables de Audax Italiano, privilegio que lo ostentan tan solo 4 jugadores del club como lo confesó Georgelino. Felipe Mora, Sebastián Vega, Diego Valdés y Meléndez son la inversión más preciada del Audax Italiano
"Cada jugador de Audax está catalogado de 1 a 5. Cinco es un jugador que puede jugar en el primer equipo y 1 es considerado un jugador que puede ser vendido a Europa y René está en esta categoría. Privilegio que él se lo ha ganado solito, porque se ha esforzado mucho", manifestó.
El reloj marca los 70 minutos y Meléndez está al borde de la cancha. Se prepara para ingresar al campo de juego. Su madre y padre lo miran desde las tribunas del estadio. Ambos están emocionados, quizás al borde de las lágrimas. Es que han sido testigo del encomiable esfuerzo de su único hijo.
Meléndez no decepcionó. Se movió por todo el sector siniestro de la cancha. Defendió, quitó y llegó con soltura al arco rival.
Su madre cuenta que "hablamos con él después del partido. Nos dijo que estaba nervioso, pero que estaba contento, porque hizo realidad su sueño y la promesa que me hizo: jugar por la Selección Chilena un mundial". J
"Es considerado
un jugador que
puede ser
vendido a
Europa"
"Ha hecho un
gran esfuerzo
para llegar a
donde está y él es
conciente que si
quiere llegar
lejos deberá
esforzarse
mucho más"