El intento de violación que sufrió una joven madre a plena luz del día y el homicidio registrado el viernes pasado han causado bastante alarma entre los habitantes de la población Aguas Saladas, en lo alto del cerro Bellavista.
Un grupo de vecinos se atrevió a denunciar estos hechos, pero por temor decidieron mantener sus verdaderas identidades en reserva. "Todos los que estamos acá hemos sido testigos de algún hecho delictual en estas últimas semanas", indicó una de las vecinas, mientras otra interrumpe asegurando que "afuera de mi casa se agarran a balazos a cada rato y son puros cabros chicos que andan con escopetas hechizas".
Teresa, vecina de calle Manuel Bulnes, cree que todos estos problemas tienen un sólo factor en común: la pasta base.
"Yo he visto a niñitos de 12 años pegándose pipazos de pasta base en las plazas. Cuando oscurece estos mismos cabros chicos son los que andan asaltando a sus vecinos o robándoles cualquier cosa para salvarse", contó la mujer.
Asimismo reveló que, debido a esta misma situación, han comenzando a operar algunos prostíbulos, los cuales, según la denunciante, serían atendidos por menores de edad.
temor
Maritza vive hace cinco años en este lugar. Contó que a pesar del estigma que siempre tuvo este barrio, era un lugar bien tranquilo. "Antes uno podía ir a comprar a la esquina tranquilamente, pero eso ha cambiado considerablemente".
"Acá la droga está dejando la escoba porque, a parte del consumo que existe, muchas personas se dedican a vender, pero nadie se atreve a denunciar porque es gente muy violenta y de mal vivir", agregó.
Para estos vecinos la instalación de un retén de Carabineros sería de mucha ayuda porque "se vería más presencia policial en las calles, y eso de alguna forma espantaría a la delincuencia".
"En Aguas Saladas no todos somos delincuentes, por eso las personas que vivimos honradamente, nos merecemos estar en un lugar digno, sin violencia ni droga", recalcó Maritza. J
Vecinos de la población Aguas Saladas aseguraron que muchos de ellos no se atreven a denuncia este tipo de hechos por temor.
"A veces uno los mira raro y te llenan a garabatos. Se imagina qué podría pasar si estos delincuentes supieran que los estamos denunciando. Capaz que nos maten a todos", comentó una vecina.