En cinco días dos jugadores de Colo Colo se enfrentaron a la justicia y hablaron sobre televisión. Uno, el delantero y figura Esteban Paredes, lo hizo esposado y como imputado, acusado de comprar tres televisores robados. Otro, el arquero paraguayo Justo Villar, declaró de forma voluntaria y sólo en calidad de testigo.
Todo ocurrió la semana pasada y precedió, coincidentemente, al partido más bajo de Colo Colo en el semestre: cayó 2-0 ante Palestino. De ahí que una horda de especulaciones psicológicas rodearan al equipo de Sierra.
Colo Colo, teorizó un comentarista de TV (curiosamente), tiene la mente en otro lado. Y eso, agregó, podría afectarle en su fin de temporada: hoy juega desde las 20 horas (transmite TVN) ante Unión Española el paso a la final de Copa Chile y por el Apertura le quedan dos partidos que definirán el título (este domingo en el Monumental ante Universidad de Concepción, y en la última fecha ante Santiago Wanderers en Valparaíso).
Golpe anímico
José Miguel Vallejos, alias Inspector, ícono de TV, aporta un dato: "Antes de ser futbolista, Paredes quería ser detective". Y lo dice para explicar que el goleador es un hombre con consciencia de justicia.
Por eso, especula, verse involucrado en un delito y aparecer frente a todo el país esposado en un tribunal lo debe tener afligido. "Indudablemente esto le afectó anímicamente, de eso no hay dudas", afirma.
Para su favor, eso sí, el Inspector explica que en 2015 la sociedad chilena es más tolerante. Que transgredir la justicia no tiene una condena social tan elevada. Y que, sobre todo en el caso de los ídolos, la gente tiende a olvidar.
"Es algo que hemos adquirido de Argentina. Mira Maradona, por ejemplo. La sociedad ve cada vez de mejor manera a los que han estado involucrados en casos así", añade.
baja de rendimiento
Lorena Contreras, una reputada sicóloga jurídica de la UDP, cree que relacionar una baja de rendimiento con la situación que vivió Paredes es algo sumamente coherente.
Y lo explica así: "Todos lo vimos esposado en tribunales. Entonces para él, y para cualquier persona, es una situación compleja. No es de extrañar que por eso su rendimiento baje".
Enfrentar un proceso judicial, dice, genera, entre otras cosas, estrés. Y eso se ve potenciado cuando el hecho se expone en los medios de comunicación.
Algunos seres humanos, agrega, necesitan de una terapia intensiva para superar el trauma. Otros, en cambio, son capaces de sobrevivir por sí solos. Cómo lo enfrentará Paredes, eso sí, para ella, la perita, es una incógnita. J
