Ayer, la Cámara de Diputados aprobó el reajuste de 4,1% de las remuneraciones del sector público. Mientras en las calles de Valparaíso se realizaba una protesta organizada por la Asociación Nacional de Empleados Fiscales (Anef), en la provincia de San Antonio los funcionarios municipales y los de las oficinas estatales se sumaron a un paro de actividades.
En El Tabo, según informaron fuentes del municipio, los funcionarios de todos los departamentos se adhirieron a la movilización, lo que implicó que se suspendiera el servicio de aseo.
En San Antonio, el paro repercutió en que se verificara una atención parcial del público en algunas de las oficinas de dicha corporación, ya que decenas de funcionarios viajaron a Valparaíso a apoyar la marcha de la Anef.
En El Quisco, la adhesión al paro fue total, por lo que no se atendió a los usuarios. Lo mismo ocurrió en Algarrobo.
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María José Hoffmann fue una de las diputadas que se abstuvo de votar el reajuste propuesto por el Gobierno. "Un gobierno mediocre fijó un reajuste mediocre. Rechazar implicaba que no recibieran nada, por eso nuestra abstención. Lamentable que la cuenta de un mal manejo económico la estén pagando los funcionarios públicos", opinó.
El diputado Víctor Torres argumentó que "en la primera votación durante el día de ayer (el miércoles) voté en contra ya que a pesar de considerarse la propuesta de reajuste diferenciado, el guarismo de 4,1 era insuficiente, más aún considerando el cálculo del IPC sobre el que se basaba (4), por lo que el aumento real era marginal. Esperaba un proceso de negociación en el Senado que no ocurrió por lo que volví a rechazar hoy (ayer) al no haber modificación respecto a la anterior". J
