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El músico sanantonino que cayó rendido a los encantos de una guitarrista brasileña

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Matías Francino (29) parece estar viviendo el momento más feliz de su vida. Frente a él está la mujer que lo tiene loco de amor: Cristina, una hermosa brasileña de 26 años a la que conoció tocando la guitarra en las calles del país carioca, se transformó en su esposa el 17 de noviembre pasado y hoy es la compañera que él tanto esperó para seguir juntos en el difícil camino del arte musical.

Ambos llevan puesta una argolla de oro, tal como lo hacen millones de enamorados por el mundo. El amor, a veces no está a la vuelta de la esquina, hay que ir a buscarlo en tierras lejanas. Y eso parece que le dio resultado a este chileno.

lluvia fúnebre

Este joven sanantonino es integrante de la banda "Lluvia Fúnebre", que desde 2009 actuó en la escena local como uno más de los grupos de trush metal con aires de industrial que surgieron en los últimos años. Hoy, aunque el conjunto no ha realizado presentaciones, él cree que hay posibilidad de empezar a tocar nuevamente.

"En 2009, en Lluvia Fúnebre recibimos una invitación para tocar en Brasil y así presentar nuestro primer CD La Opción Final y ahí viajamos; allá hice contactos y regresé nuevamente a ese país. A finales de 2010 me fui en forma definitiva y comencé a hacer mi carrera como solista en distintas ciudades como Sao Paulo, Porto Alegre y Río de Janeiro, para instalarme después en Mina Gerais, en Belo Horizonte. Allá empecé a tocar en la calle, en bares y en diferentes festivales, eso me permitió hacer algunos contactos", contó Matías.

Su intensa pasión por este arte llevó a Matías a grabar un CD como solista. "Música, polvo y asfalto" es el título de su primera producción en solitario en Brasil. Pero esa no sería la única buena noticia que generaría en aquella nación.

entre guitarristas

Un día cualquiera, en el año 2011, Matías tocaba su guitarra en una calle de Belo Horizonte. Fue así como lo divisó aquella jovencita de nombre de Cristina. Ella, amante de la música y de la guitarra, vio en el sanantonino algo que no había encontrado antes en ningún otro hombre. "Me llamó la atención que Matías toca la música con mucha emoción", admitió.

"Yo tocaba en una banda y veía que las bandas no tenían una proyección muy grande y fue así que vi a Matías tocando en la calle, y pensé que yo tenía que hacer eso mismo", afirmó la brasileña de piel tostada.

reencuentro

Al poco de tiempo de conocerse, Matías y Cristina se hicieron muy amigos y compartieron sus ideas sobre la música. Dejaron de verse y sólo mantuvieron contacto por internet. Pero, a principios de 2015, se reencontraron para estudiar la posibilidad de armar un proyecto conjunto de banda. "Ahí empezamos a conocernos mejor, fue en junio", recordó Matías al insinuar que fue en ese momento en que partió el romance.

matrimonio

El proyecto de grupo musical avanzó más lento que el amor que los unió, ya que pronto se sintieron ciertamente enamorados. "Yo le pedí matrimonio y nos casamos el 17 de noviembre en Brasil", dijo Matías mientras una sonriente Cristina reconoció que está enamorada de su compañero de andanzas. "Me gustó que a Matías le guste la música, además que es una persona muy sensible, muy atento y cariñoso", recalcó ella.

Tras firmar en el registro civil carioca el acta de matrimonio, los felices Cristina y Matías tomaron sus guitarras y, vestidos como unos novios rockeros, se fueron a tocar a una calle céntrica de Belo Horizonte, donde armaron un espectáculo musical que fue observado por cientos de personas que pasaban por el lugar.

"Comencé a tocar mientras esperaba a la novia, cuando ella llegó desde una calle principal, comenzó el show y nos casamos de forma pública, fue algo simbólico que queríamos hacer. Estuvimos tocando por casi cuatro horas y la gente nos miraba, nos tomaba fotos e incluso lo reportearon algunos medios de comunicación. Tengo una buena compañera, para mí conocerla ha sido muy importante", relató Matías.

en san antonio

Esta semana, la pareja vino hasta el puerto de San Antonio para que Cristina conozca a la familia de Matías. En esta ciudad esperan terminar el proyecto de banda que tienen juntos y lanzar un CD que represente parte de lo que son y lo que quieren proyectar artísticamente. Se miran y se nota que en ellos hay mucha complicidad.

Y aunque están casados, no piensan agrandar la familia. "Los únicos hijos que podemos tener son la composición musical, lo único que podemos crear juntos es la música y la pasión por ella", expresó el sanantonino de "Lluvia Fúnebre".

"A mí me gustó mucho la ciudad de San Antonio; acá las personas son muy receptivas y además estamos cerca del mar y es fácil transportarse de un lado a otro", manifestó Cristina.

En este puerto quieren tener una casa propia, ya que, según ellos, en Brasil los costos de una vivienda son más altos que en Chile y por lo mismo esa posibilidad se ve lejana en el país carioca.

"Mi sueño es tener una casa, pero también me gustaría seguir viajando y tocando que es lo que vivimos en nuestro día a día", concluyó la brasileña que enamoró al joven de atuendos negros que antaño se paseaba solo por las calles de Barrancas con sus aires de rockero, con sus anhelos musicales. El mismo que ahora camina con su amada tomada de la mano y el pecho henchido de esa costumbre humana llamada amar. J

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