Luego de cuatro días de extenuante caminata, el discapacitado Héctor Hernán Torres llegó al palacio de La Moneda con la esperanza de ser atendido por la Presidenta Michelle Bachelet, pero no logró ver ni la sombra de la mandataria.

El hombre de 58 años salió el mediodía del viernes desde las afueras del hospital de San Antonio y caminó por cuatro días y tres noches hasta cumplir su misión.

El vecino de Cartagena recorrió en total cerca de 110 kilómetros con la ayuda de dos bastones ortopédicos, instrumentos que usa desde 2007, momento en que se le diagnosticó un severo desgaste en la rodilla derecha.

Cansancio

Comenzó como avión, pero con el paso de las horas su cuerpo comenzó a dar señales de desgaste.

Por la tarde del sábado ya sufría de calambres y al día siguiente la planta de sus pies estaban quemadas con el calor del pavimento de la Autopista del Sol.

Su último trayecto comenzó ayer cerca de las nueve de la mañana. Salió desde General Velázquez, en Estación Central, en las cercanías de la municipalidad de la mencionada comuna metropolitana, lugar en el que durmió en una improvisada cama la noche del domingo.

A medida que avanzaba hacia el oriente, por la Alameda, fue animado por distintas personas de la Corporación Nacional de Discapacitados de Chile (Conadich), quienes lo acompañaron durante gran parte del peregrinar.

En palacio

Cerca del mediodía llegó hasta el palacio de gobierno. Su intención era dejar una carta para Bachelet, pero siempre pensando en la posibilidad que ella lo pudiese recibir; sin embargo, eso no pasó.

Entregó la misiva en que "pide un trato más humano" en el sistema público de salud y que se terminen con las listas de espera y luego salió rumbo a la Intendencia de la Región Metropolitana, ubicada a pasos de La Moneda.

La idea era dar las gracias por el despliegue de seguridad que se efectuó a lo largo de toda la ruta, especialmente a Carabineros, que lo custodió y acompañó durante los cuatro días. Pero en el acceso al recinto, todo cambió con el arribo del intendente Claudio Orrego.

El ex candidato presidencial y ex alcalde de Peñalolén se tomó el tiempo de escuchar a Torres y de recibir una copia de la misiva entregada minutos antes para la jefa de Estado.

satisfacción

El discapacitado reconoció el cansancio, fundamentalmente el desgaste en sus extremidades, pero mostró su satisfacción por la tarea cumplida.

"Estoy bien. Muy cansado, pero siempre supe que esto iba ser así. Salí de San Antonio con la voluntad de llegar a La Moneda y lo hice a pesar del cansancio", comentó el hombre.

"Esto no es por mi caso en particular, que se encuentra resuelto prácticamente desde el momento en que anuncié la caminata, sino que por las más de 400 mil personas que esperan por una prótesis", agregó al término de su sacrificada protesta. J