Asesino de joven maestro de cocina pidió perdón por matarlo
Ayer partió juicio oral por homicidio. Autor confeso entregó detalles del brutal crimen.
Una puñalada en el corazón. Esa fue la herida que terminó con la vida de un maestro cocinero en febrero de 2015. Un año más tarde el autor de la mortal puñalada entregó detalles del fatídico hecho y pidió perdón.
"Quiero pedir disculpas públicas, pedir perdón a la madre (de la víctima). Soy padre y siento el dolor que ella siente en este momento". Con esas palabras comenzó su declaración José Belmar Rojas ante el Tribunal de Juicio Oral en lo Penal. El acusado deberá responder por su responsabilidad en el homicidio de José Navarro Marín (24).
El maestro de la construcción fue detenido por la PDI el 15 de febrero de 2015, horas después de haber dado una puñalada en el corazón a José Navarro, un joven de 24 años que trabajaba como maestro de cocina en El Quisco, comuna donde ocurrió el feroz crimen.
Frente a los jueces, presididos por el magistrado Claudio Espinoza, Belmar narró el asesinato.
"Empezamos a darnos empujones con la víctima y él en un gesto se mete la mano al estómago, como queriendo sacar un arma, y me decía que me iba a matar. Pensé que me iba a matar. Yo andaba con la mochila, saco el cuchillo de la mochila", narró sobre el momento previo a la mortal agresión.
Belmar continuó. "Pensé que me iba a matar. Le enterré el cuchillo, no sé dónde se lo enterré. Le pegué un puntazo, no sé en ese momento cómo fue. Se lo di con la (mano) izquierda. Cuando le pego, lo veo que se echa para atrás y cae el suelo", expuso ante los jueces.
Más tarde relató que luego de la agresión unas personas que estaban junto a la víctima salieron persiguiéndolo. Dijo que le gritaban que lo iban a matar y que incluso habrían disparado en contra suyo. "Yo corrí y corrí para salvar mi vida", aseguró.
En este punto el fiscal a cargo de la investigación, Álvaro Pérez Verde-Ramo, lo cuestionó preguntándole por qué no acudió a Carabineros si temía por su vida cuando se enfrentó a Navarro y luego al ser perseguido por un grupo de personas con armas de fuego. La respuesta fue que no se le ocurrió.
Toda la discusión que terminó con un fallecido se originó por el supuesto robo de una pala a un amigo del acusado.
El Ministerio Público solicitará al tribunal una pena de 15 años de presidio contra el autor confeso del crimen, quien no cuenta con antecedentes penales.
24 Esa era la edad de José Navarro, quien fue asesinado en El Quisco el 15 de febrero de 2015.