Rodrigo Ogalde
Pozas inmensas de orina acumulada, envases de cervezas y basura. Eso era lo que había ayer por las escaleras, los juegos infantiles y el anfiteatro del Talud 21 de Mayo, el lugar que permite ver una hermosa panorámica del puerto, pero que se ha transformado en una horrible muestra de incultura local.
"Feo, feo", alcanzó a gritar un anciano que, sentado en uno de las bancas del talud, salió huyendo de las cámaras de soysanantonio.cl y Diario El Líder. La gente, a veces, tiene miedo de expresar su opinión sobre los temas ciudadanos y guarda silencio, el conveniente silencio que hace que nada cambie y que lo malo persista.
El sábado recién pasado, un sanantonino tomó una fotografía del Talud 21 de Mayo con las muestras evidentes de haber sido el epicentro de una regada juerga. En la imagen se aprecian abundantes desechos, botellas semi vacías y a un señor que duerme plácidamente en una de las aposentadurías del anfiteatro. Los vecinos consultados por nuestro medio contaron que esta escena empieza a montarse cada noche de fin de semana. Al otro día, con la luz del sol, los personajes ya han desaparecido, pero la huella de su paso se nota en la maloliente orina que circula tenuemente escalera abajo.
"El lugar está bonito pero en la noche lo ensucian mucho. Yo vine con mi nieta y veo que está lleno de colillas de cigarro, botellas y latas de cerveza", afirmó José Román, quien ayer visitó el talud junto a su regalona.
La sanantonina Pilar Meza, quien ayer llevó a sus familiares argentinos a recorrer el talud, también lamentó lo que pasa en dicho punto turístico. "Es lindo pero hay olores feos", dijo. El mendocino Franco Moyano también advirtió los problemas del lugar: "Es bastante lindo pero bastante sucio también", concluyó el trasandino.
2.280 millones de pesos invirtió el Estado chileno en las obras del Talud 21 de Mayo