Jesús Farías Silva
El Programa Calle de Municipalidad de San Antonio reveló ayer un detallado informe en que se aclara la situación de la pareja que vive hace un mes en una carpa en las cercanías del Consultorio de Bellavista.
En el documento se explica que a Margot Ortiz (43) y a Cristián Pulgar (46) se les ofreció trabajo en dos oportunidades, pero que estos no se presentaron, y que distintos servicios del gobierno comunal les han asistido con ropa de cama y plástico, entre otros enseres.
"Hace poco más de un mes se pesquisó a esta pareja de quienes se tomaron los antecedentes, como lo hacemos de costumbre con las personas en situación de calle (…) para saber su situación y qué motivó a ellos a vivir en esta condición. Una vez recopilados los antecedentes, procedimos a generar un apoyo para que en lo posible salieran del lugar, ya que éste no les ofrecía las condiciones de seguridad y confort que ellos requerían", dice el texto.
Ayuda
De acuerdo a lo informado por el municipio, aunque los indigentes no pertenecen al Programa Calle, se les brindó ayuda psicosocial y apoyo laboral.
"Respecto al apoyo psicosocial, se les visitó en muchas ocasiones, fueron visitas personalizadas de profesionales del Programa Calle para hacer seguimiento y entrega de implementos para la lluvia. Destacar que en una visita de los profesionales, (…) Cristóbal Pulgar manifestó que ellos estaban en este lugar y en esas condiciones pues era la única forma que les ayudaran a conseguir cosas", revela el texto, el que detalla que se les entregó dos colchonetas y polietileno (plástico) para mejor resguardo.
Trabajo
"Se les citó a la oficina del Programa Calle, se les acompañó para que se inscribieran en OMIL y se generó en conjunto con la encargada de dicha oficina, dos cupos laborales, los cuales estaban reservados para ellos, pero no se presentaron en otras dos ocasiones en que se les citó", agregan.
"Del consultorio de Bellavista, fueron inscritos en éste para su atención en salud, les convidaron agua, y el uso de los servicios higiénicos del recinto mientras se instalaban en otro lugar. Se les permitió que aparcaran vehículos fuera del consultorio sin la debida autorización del Departamento de Inspección para que generaran ingresos para su sustento. Los vecinos les proporcionaron una carpa, ropa y comida a diario", aclaran desde el municipio.
"De parte del Condominio de Viviendas Tuteladas Adulto Mayor (CVT) se les entregó todo el apoyo posible, proporcionándoles ropa de cama (frazadas), agua y comida, la cual después de un par de semanas se les negó, pues éstos comenzaron a manifestar conductas agresivas entre sí y hacia los adultos mayores que viven en el recinto, sobre todo los fines de semana, no dejando dormir bien a los adultos mayores por las conductas de desorden que ellos mantienen", finaliza el citado documento.
"En una visita de los profesionales, (…) Cristóbal Pulgar manifestó que ellos estaban en este lugar y en esas condiciones pues era la única forma que les ayudaran a conseguir cosas",
Programa Calle.