La tradición de la bohemia en el corazón de la Plaza de Llolleo
El local "Anthurium" cumple esta noche 28 años de vida desde que Adela López dejó su trabajo como garzona y se decidió a empezar desde cero con un local que se convirtió en tradicional para los sanantoninos y llolleínos.
En la década de los noventa, el Teatro Providencia de Llolleo se caracterizó por traer a reconocidos artistas nacionales e internacionales para actuar sobre su escenario. Grandes grupos, solistas, músicos que en esa época estaban marcando tendencia se presentaban ante un público que los llenaba de aplausos y cariño.
Tras bajar el telón de cada función, la gran mayoría de esos mismos artistas caminaba un par de metros, cruzaba la Plaza de Llolleo, y comenzaba a festejar en el tradicional "Anthurium".
Su dueña por aquel entonces, Adela López, recibía gustosa a sus ilustres invitados, los que en agradecimiento volvían a cantar e interpretar los mismos éxitos que habían sido coreados minutos antes en el Providencia.
"Mi madre se reía de eso, ya que decía que la gente había tenido que pagar por ver a los artistas en el Providencia y ella los tenía gratis en su local, a veces haciendo incluso mejores shows para el público de acá", acota dos décadas después de aquellas anécdotas Eduardo Farías López, actual administrador del clásico "Anthurium Restobar".
Esta noche de 17 de junio, el local cumplirá 38 años desde que fue construido, y 28 años desde que asumió la actual administración. Fue Adela López la encargada de conseguir en 1988 el arriendo tras trabajar como garzona por varios años en el Pancho Crucero. "Los mismos dueños de ese entonces del Anthurium la incentivaron y motivaron para que se hiciera a cargo del local y lo arrendara. Los propietarios de acá, que son quienes lo bautizaron con este nombre, son dueños de toda la manzana y nunca han querido venderlo, así que los 28 años lo hemos arrendado", reconoce Eduardo Farías.
Fue en el año 2010, después del terremoto, que Eduardo asumió la totalidad del trabajo como administrador. Su madre Adela, por problemas de salud, se fue alejando poco a poco del lugar que construyó desde cero. "Ella trabajaba todo el día acá, siempre feliz, con una buena relación con el personal de trabajo. Entonces para ella fue difícil alejarse tanto. Pero por una enfermedad ahora está en casa con el cuidado de mi hermana", afirma Eduardo, quien desde chico acompañó varias veces a su madre a su lugar de trabajo.
Histórico en llolleo
Los mejores años del "Anthurium" fueron durante la década de los noventa. De hecho, la señora Adela logró tener durante esa época cuatro establecimientos con el mismo nombre que estaban en diferentes sector de la Plaza de Llolleo. Uno incluso funcionaba como residencial y era ideal para que las familias alojaran en Llolleo durante el verano.
Pero la irrupción de los pubs y las discotecas desvió la atención de la bohemia nocturna llolleína a diferentes focos. "En un momento todos iban a rematar a nuestro local, pero a finales de los noventa irrumpieron los pubs, como la Muralla de Zapata por ejemplo, entonces fuimos perdiendo público y mi madre tuvo que dejar los cuatro locales y quedarse solamente con el de Inmaculada Concepción", afirma Eduardo Farías, quien se comprometió en el 2001 a la misión de darle un nuevo aire al "Anthurium".
Así llegaron los karaokes, los happy hours, los cantantes en vivo. Acorde a las exigencias del público, el tradicional local llolleíno logró imponer su sello en la bohemia local y se hicieron de un fiel público que los sigue hasta el día de hoy.
Gran fiesta
Será esa leal clientela la que esta noche podrá disfrutar de un gran show producto del aniversario número 28 desde que Adela López decidió dejar de lado su labor como garzona para dar inicio a su proyecto personal.
Desde las diez de la noche, y con la animación del "Negro José Luis", se estará recibiendo a los asistentes que tendrán la posibilidad de disfrutar de excelentes ofertas como el dos por uno en chorrillanas y el happy hours hasta las doce de la noche.
Y para que la fiesta sea completa, desde la medianoche comenzará la actuación del humorista "Pablo Estomar, El Patrón", quien realiza una parodia del colombiano Pablo Escobar que se hizo muy conocida en el programa "Morandé con Compañía".
Luego del humor será el turno de la música bailable con el cantante Rigeo, ex chico Mekano, quien interpretará todos sus clásicos como "Danger Cuidado" o "Lupita".
Pero eso no es todo, ya que los sanantonino solteros podrán compartir y sacarse fotos con la guapa modelo Eli Villablanca, una de las regalonas de los hombres a lo largo del Litoral Central.
"A los que más les agradecemos por estos 28 años de trabajo es a nuestros clientes, porque sin ellos no estaríamos aún funcionando de lunes a domingo prácticamente abiertos todo el día. Por acá han pasado varias generaciones de sanantoninos. Muchos cuando vienen a ver un partido por la tele, dicen que se acuerdan cuando sus padres los llevaban a comer y ver algún partido. Estamos muy contentos de habernos convertido en un punto de encuentro tradicional dentro de Llolleo", dice Eduardo Farías.