Profesor creador del ConComics cuenta el origen de su gran pasión
Si al igual que Eduardo Barraza, no le satisface ver las películas de Marvel o DC Comics, y busca más detalles de sus héroes favoritos a través de las historietas, tiene que leer la siguiente entrevista.
Sentarse en el cine para ver el estreno de Capitán América: civil war, mientras en el regazo se sostiene un paquete de cabritas, es el panorama perfecto para muchas personas, pero no el favorito de Eduardo Barraza Molina (38) creador de la ConComics.
El antofagastino que se radicó hace doce años definitivamente en San Antonio, desde muy pequeño ha está ligado con el mundo del cómics.
Sus padres de una forma u otra le fueron traspasando el amor por las caricaturas, que hasta hoy son su único vicio.
"Mi madre aportó con mi gusto por los cómics porque cuando me empezaron a gustar, ella me los compraba", recuerda con alegría.
Eduardo leía sin parar una historieta tras otra, hasta que un día logró coleccionar un gran número que, desafortunadamente, desapareció cuando se cambió de casa a Valparaíso.
"Aún recuerdo ver en los años 80's la mítica revista Bandido en uno de los quioscos en el terminal internacional de buses de Arica".
Como buen fan de los cómics, intentó bosquejar a sus superhéroes, pero no le quedaban como quería. "Siempre me gustó dibujar, obviamente por el tema de que mi papá también lo hacía y ellos me apoyaban".
-¿Cuál fue tu primer cómic?
-Yo creo que el primer cómic de todos los chilenos fue el de Condorito (ríe), pero yo recuerdo que mi primer cómic fue uno de Flash cuando se enfrenta a Mano Negra.
Ese regalo de parte de sus padres lo hizo aficionado a estas entretenidas historietas. "Después me compré Barrabases N°1 de la cuarta época. Esos tres momentos marcaron mi vida", aclara.
Y, aunque últimamente Condorito no le causa mucha gracia, aún tiene en su retina las tardes en donde leía y reía a carcajadas con sus aventuras.
"Como lo compró Televisa no es lo mismo. Antes tenía todo un carácter nacional, ya no es tan burlesco como antes".
En su colección se encuentran los Condoritos de Oro en formato gigante que son muy difíciles de encontrar en el país.
"La colección completa son nueves y yo sólo tengo tres. Con eso me doy con una piedra en el pecho", dice orgulloso.
El sueño de niñez de Eduardo era ser un exitoso dibujante de cómics, pero el destino no lo quiso así.
"No daba el ancho, así es que me propuse ser guionista de cómics, pero a nadie le gustaban", cuenta con humor.
LA gran idea
En el 2000 fue a vacacionar a La Serena y con un grupo de amigos se le ocurrió hacer un evento llamado "SerenaComics".
A la convención asistieron muchos jóvenes que al igual que él, eran fanáticos por los cómics, así que se le vino una gran idea a la cabeza.
"El evento estaba bueno, así que quise recrearlo en Valparaíso".
Mientras cursaba Pedagogía en Historia en la Universidad Católica de Valparaíso, postuló y ganó el proyecto "Confía".
"En el 2001 empezó la primera convención de la universidad, que después se llamó ConComics".
16 años de historia
Este evento que entretiene a grandes y chicos, anteriormente, presentó personajes de talla mundial de manera completamente gratuita.
"Trajimos a investigadores y dibujantes de cómics de Argentina, sin ningún costo para los espectadores", indica.
A San Antonio
Trasladar el concepto a San Antonio no fue tarea fácil, porque no encontraba un recinto amplio para realizar este evento masivo.
Su esposa, Claudia Abarca, lo animó muchas veces para que la ConComics no se acabara de un día para otro. "Gente de Santiago y Valparaíso me decía que si no la retomaba iba a morir".
El entusiasmo y apoyo de sus cercanos y conocidos, le dio el ánimo para continuar.
En enero del año pasado debutó en la comuna con una grata sorpresa. "Había mucha gente", agrega Eduardo.
-¿Hay potencial en San Antonio?
-Sií, acá hay muchos chicos que dibujan. BadPro, Leonel, La Plaga y muchos más están tratando de abrirse paso. Lo bueno de ellos es que tienen la editorial Bad Pro que los impulsa.
Los "Ñoños"
La gente que se interesa por leer cómics o películas de superhéroes son catalogados por la sociedad como "ñoños", pero a Eduardo no le interesa y admite su "ñoñez" con orgullo.
"El prejuicio lo viví bastante en la universidad, pero ahora no es tan así. Ahora, con las películas de Marvel todos disfrutan de las historias".
Los espectadores podrán disfrutar de las escenas de acción de la nueva película de Capitán América: civil war, sin embargo, no conocerán todos los detalles que hay en la historia.
"Las películas son buenas, pero no son lo mismo que el cómics", evidencia Eduardo.
-¿Cuál es la diferencia de Civil War, por ejemplo?
-La gente sigue criticando Civil War porque eran cuatro contra cuatro, y en el cómic son 300 contra 300. Es difícil tratar de poner 300 personajes en una pantalla por dos horas. Se podría hacer, pero tendría que ser como la trilogía del Señor de los Anillos o El Cuervo.
Dejando las críticas de lado, a Eduardo le gusta vivir en esta época, en donde sus queridos héroes tienen cabida en la pantalla grande .
"Qué bueno que puedo ir al cine a verlos porque no sé cuánto va a durar todo esto".
El fanatismo de Eduardo es tal, que incluso llegó a realizar un cosplay de Lobo hace unos años en el evento Retrobits en La Serena.
-¿Ganaste algún concurso con tu disfraz?
-No, mi idea es pasarla bien. Para mí no es importante ganar un concurso porque para ganar hay que invertir mucha plata. En Chile hay muy buen nivel de cosplayers.
-Por tu fanatismo por el mundo de los cómic ¿Te consideras una persona con espíritu de niño?
-Sí, porque los niños tienen miedo y son aventureros. Me gusta hacer cosas y tengo el miedo suficiente para irme regulando e ir construyendo.
Pasatiempo en Familia
El gusto por el mundo de los cómics es un pasatiempo que comparte en familia.
Las historietas son leídas y ojeadas por toda su familia, pero anteriormente Eduardo coleccionaba cartas Mitos y Leyendas, películas, figuras y cómics, pero como no hay bolsillo que aguante, tuvo que tomar una decisión.
"Las cuatro eran igual de caras. Me decidí por los cómics porque era lo que hacía primero y lo que más me gustaba".
Lo más caro que ha comprado ha sido objetos de 25 mil pesos, pero el valor de los artículos es superior.
Eduardo comparte en cada evento su colección para que más niños y adultos se interesen por las historietas y se animen a coleccionarlas.
"Las llevo a la ConComics y las personas la leen felices".
Próxima Concomics
Todos los días Eduardo y Claudia contestan los correos electrónicos de personas interesadas en participar en la ConComics que se realizará en vacaciones de invierno en el Centro Cultural de San Antonio.
"La gente recordó las ConComics anteriores y han querido participar", interviene Claudia para agregar sobre los preparativos de la convención.
En el evento estarán Martín Cáceres, Jorge Baradit, Carlos Badilla y Sebastián Castro.
"Martín es un prócer de la historieta nacional. Hizo uno de los cómics más importante de los años 90's y trabajó con Alan Moore. Por otro lado, Jorge es guionista de cómic, fundador de la Radio Demente y creador de la Zombie Walk. Carlos es un colorista nacional que trabajó en DC Cómics", explica.
Los organizadores quisieron destacar el patrocinio del Centro Cultural de San Antonio y la Constructora Santa María de Santiago, por ayudarlos a lograr sus proyectos.