Esposa y madre de dos de los pescadores: "Pensamos que están vivos en el bote"
Pese a los esfuerzos desplegados por la Armada, el Club Aéreo de San Antonio, el Grass, las familias y los compañeros de labor, los cuatro trabajadores no han sido encontrados.
Al mediodía de ayer, dos aviones del Club Aéreo de San Antonio despegaron desde el aeródromo de Santo Domingo. Los pilotos Fabián González y Darwin Iglesias junto al presidente de dicha institución, Jorge Ponce, se sumaron a la tarea titánica de encontrar a los cuatro pescadores artesanales que tripulaban el bote "Don Juan II" que naufragó la mañana del sábado, a 18 kilómetros al oeste de la costa de San Antonio.
En una de las aeronave se embarcaron dos profesionales de Diario El Líder, que comprobaron cómo la Armada y los propios compañeros de los pescadores han desplegado grandes esfuerzos en esta labor.
Tras una hora y 20 minutos de sobrevuelo, los dos aviones aterrizaron en la pista santodomingana. En la cara de los pilotos había desazón. "Sentimos un poco de desesperanza, pero siempre mantenemos la posibilidad de seguir buscando y colaborando con las familias que sufren tanto dolor en este momento", expresó Jorge Ponce, quien informó que las dos aeronaves se desplegaron en un amplio sector comprendido entre Quintay, en Casablanca, y Punta de Toro, en Santo Domingo.
En forma paralela, durante la mañana de ayer, la Armada sobrevoló por cuatro horas las costas de la provincia. Así lo confirmó el gobernador marítimo de San Antonio, Zvonimir Yuras, quien recalcó que la búsqueda se prolongará por siete días.
No pierden la fe
Tras comprobar que la tercera jornada no tuvo éxito, Yuras dijo que "cada día que pasa las posibilidades de obtener resultados positivos disminuyen". Sin embargo, admitió que nunca deben perderse todas las esperanzas, por lo que seguirán con las tareas de búsqueda.
Por la tarde, la madre del pescador Juan Ambrosetti Santander (18) y esposa del patrón del bote, Juan Ambrosetti Adasme (64), expresó su total confianza respecto a que los tripulantes están vivos. "Pensamos que están en el bote porque mi viejo es experimentado e incluso puede tener a los chiquillos amarrados; pueden estar sin bencina o sin motor, pero la embarcación flota", dijo la mujer.
Para colaborar con esta misión, familiares de los pescadores recorrieron los sectores aledaños a la desembocadura del río Maipo y los Ojos de Mar. "Estamos muy angustiados y necesitamos que nos ayuden a buscar, que las autoridades puedan disponer de más recursos para que podamos encontrarlos", indicó Claudia Mesina, sobrina de Carlos Ibarra Berríos (61), uno de los desaparecidos.
Las familias, que han aguardado por noticias de sus seres queridos en el muelle de Puertecito, se reunieron a última hora de ayer con el capitán de Puerto de San Antonio, Alex Rich, quien les entregó un informe detallado de todas las acciones desarrolladas por la Armada para dar con los cuatro hombres de mar.
Cruel rumor
El episodio más despreciable del día se dio en las redes sociales cuando una persona echó a andar el rumor en Facebook de que los pescadores habían aparecido vivos, lo que primero alegró a muchos y luego, al no ser cierto, generó rabia y dolor.
Otros pescadores informaron del hallazgo en altamar de un bidón que pertenecería a uno de los pescadores que iba a bordo del bote, pero esto no fue confirmado por los familiares directos.