A las 21 horas del pasado 1 de agosto, Chilevisión estrenó una de las mayores innovaciones tecnológicas en la historia de los noticiarios en Chile. Se trata de una moderna escenografía que consiste en un sencillo escritorio y una pantalla de, nada más y nada menos, trece metros de ancho y casi tres de alto.

Ningún otro medio de comunicación en América tiene una similar. ¿Quién tiene el privilegio de usarla? Un sanantonino. ¿Ve? Siempre hay uno en todas partes.

En el año 2000 Pablo Figueroa se fue del puerto a Santiago en busca de cumplir su sueño de ingresar al mundo audiovisual. Y lo logró con creces. Hoy es un crack de la televisión y uno de los profesionales más respetados de la estación privada.

Entró como practicante a la cadena televisiva cuando era uno de los canales más pequeños y con menor audiencia del país.

Más de quince años después el panorama es muy distinto. Pablo es el jefe de Dirección y Audiovisual del Departamento de Prensa, el canal pelea los primeros lugares de sintonía y su noticiario posee la mayor tecnología de la industria local.

"Me siento como Kiko del Chavo del 8, cuando presume que su pelota es más grande que la de todos los demás de la vecindad", confiesa.

"Mi jefe me dijo que esto es como pasar de un Fiat a un Ferrari, ahora sólo tengo que manejarlo", agrega.

Pero ¿qué tiene de especial la nueva escenografía de Chilevisión Noticias? Según Pablo, es la cuarta pantalla con estas características en el mundo. Las otras tres sólo existen en Europa.

"Recorrí YouTube entero buscando tecnología similar y la encontramos en Alemania y en Polonia", cuenta.

Una tecnología tan sofisticada y poco frecuente no puede ser usada por cualquiera. La empresa encargada de la instalación de la pantalla capacitó a Pablo y a sus ayudantes para manipular correctamente los cuatro proyectores que forman la gigantesca imagen del set.

Secretos de chv

La pega no fue fácil. Pablo se estuvo preparando más de cinco meses para echar a andar el nuevo estudio de prensa del canal privado, que hace muy poquito se cambió de edificio.

Atrás quedaron los tiempos de pobreza de la señal que hizo historia con "El club de los Tigritos" y "Extra Jóvenes".

"Cuando yo llegué, en el 2000, hacíamos el noticiario con Alejandro Guillier desde un estacionamiento. Si alguien quería salir tenía que pedir permiso para no meter bulla y si se activaba una alarma era una catástrofe", revela el ex estudiante del Liceo Nacional.

-¿Notas envidia de los otros canales?

-Suponemos que sí. Con esto nos despegamos de la competencia. Estamos mucho más adelante.

"Pero lo más importante es que esto no es arte de magia, es harto trabajo, y en esta pega, casi única en el mundo, hay un sanantonino. Así que nadie diga que no se puede salir de allá (de San Antonio) y no cumplir los sueños. Eso no hay que olvidarlo jamás. Yo siempre vuelvo con cariño a mi San Antonio", finalizó Pablo Figueroa.