Johnny Herrera lucha contra el tiempo. El portero de Universidad de Chile todavía no se recupera del esguince en la rodilla derecha que sufrió en el pasado duelo ante Deportes Antofagasta y es duda para el clásico de este sábado frente a la UC.

Fue el propio portero el que le pidió al cuerpo médico esperarlo hasta último minuto para ver si puede estar presente ante los cruzados. "En otras circunstancias, Johnny ya estaría descartado ante la Católica, pero su deseo es jugar, y se le va a evaluar durante la semana. Estos días se le exigirá para ver si está o no para jugar el sábado", reconocieron desde el CDA.

En ese sentido, el cancerbero pidió ser exigido a fondo en el entrenamiento de mañana, con una intensidad parecida a la de un partido.

En caso de que Herrera no logre recuperarse, su reemplazante seguirá siendo Nelson Espinoza, debido a que Fernando De Paul continúa recuperándose de una operación.

En la UC quieren acabar la mala racha ante la U

Universidad Católica enfrentará el clásico frente a la U con la presión de dejar atrás el mal arranque en el Torneo de Apertura, donde aún no conocen de victorias en cuatro partidos.

Y en el elenco cruzado aseguraron que intentarán por todas las formas conseguir la victoria para no enredarse más en la competencia. "Es un partido importantísimo. Es una semana de clásico y el plantel y todos lo vivimos distinto. Tenemos que dejarlo todo. Siempre estar pensando en el arco. Tenemos que ir a ganar y pelear siempre los torneos", reconoció el defensa Stefano Magnasco en conferencia de prensa, agregando que las derrotas sufridas "han sido golpes duros pero nos hemos levantado de golpes más duros aún".

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Se sabía que Claudio Bravo estaba incómodo en el Barcelona y que la imposibilidad de jugarlo todo fue clave en su decisión de partir al Manchester City. Pero hay algo más.

No sólo la eterna lucha con Marc Ter Stegen o sus ganas de jugar la Champions cumplieron un rol fundamental a la hora de dejar a uno de los mejores equipos del mundo.

Según reveló el portal catalán Sport, hubo otro motivo que pesó en la decisión del meta chileno de dejar España y partir a Inglaterra para trabajar junto a Pep Guardiola: su futuro en el Barcelona.

Es que si bien el secretario técnico del club azulgrana, Robert Fernández, manifestó que intentaron renovar el contrato del capitán de la Roja, lo ofrecido no estuvo acorde a sus expectativas.

"Bravo confiaba en sellar una generosa ampliación de contrato que contemplara una o dos temporadas más y un importante aumento de sus ingresos. El chileno era uno de los 'titulares' con una ficha más baja en la plantilla. Sin embargo, la propuesta del Barça no iba más allá de un año y el incremento económico no cubría las expectativas del portero", explica Sport.

Así la oferta realizada por el cuadro español estaba muy lejos de lo requerido por el chileno, que no tan sólo pedía una mejora económica, también un sustento deportivo, algo que sí le garantizaba el Manchester City. "La oferta del City conlleva los dos grandes anhelos del chileno: presencia indiscutible en un equipo diseñado para luchar por todas las competiciones en las que compite y una ficha acorde al status de estrella. Bravo ingresará una ficha que duplica sus ingresos en el Barça", añade el citado medio.

De esta forma, la suculenta propuesta del equipo inglés puso otro punto clave sobre la mesa, uno que sumado a la rivalidad con Ter Stegen y a la incertidumbre que reinaba en Barcelona, no hizo más que terminar de convencer al seleccionado nacional de partir a Inglaterra.

Pero más allá de los verdaderos motivos, el conjunto catalán ya es historia para el bicampeón de América, quien llegó a Manchester para cerrar su traspaso al ex equipo de Manuel Pellegrini.