Carolina Bustos Muñoz
Muy preocupados se encuentran los vecinos de Llolleo, específicamente de las calles Arzobispo Vicuña, Mercedes Sur y Santa Lucía, a raíz de los últimos hechos delictuales que se han registrando en este sector.
Hace unos días, una profesora del colegio Gabriela Mistral se convirtió en víctima de un violento asalto mientras estacionaba su vehículo en calle Arzobispo Vicuña.
"Mi colega estaba estacionando su vehículo al costado del Colegio Nueva Providencia (Arzobispo Vicuña) a eso de las 18.45 horas, cuando dos muchachos le quitaron la cartera que después lanzaron al interior del Liceo Santa Teresita. Al final, sólo le robaron cinco mil pesos, pero ella se llevó el tremendo susto", contó Clara Salas, directora del colegio Gabriela Mistral, quien se mostró muy preocupada por la situación.
"Pero eso no fue todo porque a los pocos días de ocurrido el asalto a la profesora, un apoderado sufrió un robo en su vehículo que estaba estacionado en calle Mercedes Sur. A ella le robaron la mochila de su hija y otras cosas", agregó la directora del establecimiento llolleíno.
Ambos hechos fueron denunciados a Carabineros que ha intensificado las rondas en esta lugar a petición de la directora del colegio Gabriela Mistral.
"Hasta las Damas del Cáncer que tienen su sede por ahí cerca fueron víctimas de un robo. A ellas les causaron mucho daño porque les robaron las cañerías de cobre", manifestó.
Sospechosos
Vecinos de calle Santa Lucía aseguraron que en estas últimas semanas han visto a un sujeto merodear sus casas.
"Claro que estamos asustados porque los delincuentes ya no tienen respeto por nada ni por nadie. Yo he visto a un tipo joven que anda dando vueltas, pero no puedo decir que sea él, aunque cada vez que aparece le roban a alguien", señaló un vecino, que por temor a represalias prefirió no entregar su nombre.
"El otro día asaltaron a una familia que vive cerca de la Constructora del Puerto. Unos tipos armados se metieron a su casa", agregó el vecino.
Según este vecino, la falta de luminarias y los grandes árboles ubicados en algunas calles hacen propicio el actuar de los amigos de lo ajeno.
"Estas calles son muy oscuras, además en la noche no anda nadie por aquí. A lo mejor si pusieran más luz o cortaran los árboles la situación podría cambiar", explicó este vecino.
18.45 horas se registró el asalto a una profesora del colegio Gabriela Mistral.