A contadora le robaron cartera con $5 millones en la puerta de su casa
Además del dinero en efectivo, hampones cobraron cheques por un millón 200 mil pesos. Familia vive drama tras atraco.
"Estaban cerquita de mi casa esperándome. Apenas me bajé del auto se acercaron, me tomaron la cartera y salieron arrancando. No fue algo al azar". Para Silvia Orozco, está más que claro que el robo que sufrió la noche del lunes recién pasado fue planificado.
Ese día, minutos antes de las 22 horas, la profesional se bajó del auto de una colega en calle Los Venados, en Llolleo Alto, tras una ardua jornada de trabajo. Por su condición de contadora auditora llevaba consigo, explicó la afectada, una alta cantidad de dinero en efectivo que había reunido de clientes a los cuales les realiza trámites bancarios.
Los lanzas, altos y de aspecto juvenil, corrieron hasta la mujer de 60 años y le arrebataron la cartera donde llevaba 5 millones de pesos en billetes.
"Fue en un segundo. Apenas los alcancé a ver. Los seguí corriendo, pero en la esquina los estaban esperando en un auto. Se subieron para escapar. Eso más me confirma que estaba todo planificado", analizó la víctima del robo por sorpresa.
Como si fuera poco el daño, dentro de su bolso portaba cheques que su clientela le entregó para realizar retiros de dinero en distintos bancos. Ayer los mismos antisociales fueron a cobrar dichos documentos.
"Como fue tarde y como dentro de la cartera estaba mi celular no pude llamar a mis clientes (muchos de los cuales viven en sectores rurales alejados de San Antonio) para que dieran orden de no pago. Pese a que fui temprano a los bancos para hacer la advertencia ya habían cobrado dos cheques", explicó la contadora.
Se trata de documentos bancarios que cobraron por 700 mil pesos en el Banco de Chile y otro por 495 mil en el BancoEstado.
"Colocamos la denuncia que corresponde y lo hago público para que colegas tomen resguardos al andar con dinero en efectivo, porque la delincuencia es mucha", dijo Silvia Orozco. Su esposo Nicolás Espinoza agregó que "ya no se puede trabajar tranquilo. Ahora nos destruyen como familia porque tendremos que enfrentar este robo y pedir hasta préstamos para devolver el dinero robado", lamentó.
Drama
Tener que pagar el dinero ajeno que les sustrajeron no es el único drama que sufre la familia Espinoza-Orozco tras el atraco. Esto porque mes a mes destinan casi todos sus ingresos en costear la enfermedad terminal de su hija.
"Tenemos que pedir un préstamo para pagar este robo y además para poder seguir con el tratamiento de mi hija, que tiene una enfermedad en la médula. Además yo padezco de depresión debido al mismo estado de mi hija", reveló Nicolás acongojado.
Frente a la violenta experiencia que enfrentaron, este matrimonio dice que esperan salir adelante pero que "la seguridad debe existir, para que la gente que trabajamos podamos hacerlo sin miedo".
Silvia remató confidenciando que "hoy me veo tranquila y todos me dicen que cómo estoy tan calmada después del robo, y yo les digo que he llorado tanto por la enfermedad de mi hija que ya no me quedan lágrimas".
2 cheques robados a la contadora cobraron ayer unos sujetos en dos bancos.

