Sí, sí Colombia, sí, sí Caribe: parceros llegaron con todo el dulce a San Antonio
Mauricio Londoño arribó a Chile hace un año y medio y su primera noche la pasó en una fría plaza de Santiago. Luego se mudó a Barrancas, donde trabaja en su propia pastelería, El Galeón, preparando dulces con sabor colombiano.
Hace 18 meses que Mauricio Londoño (35) dejó su natal Medellín, Colombia, para ir en busca de su sueño. Un sueño sufrido en un comienzo, pero que hoy es mucho más dulce de lo que él mismo alguna vez pensó.
Sus dos hijos lo obligaron a dejar su ciudad y su país para ir en busca de más oportunidades, esas que según cuenta este "parcero", como le dicen a los habitantes de Medellín, escasean en su querida Colombia.
"Es difícil tomar la decisión de salir de tu país. De irte a la aventura buscando un sueño que puedes cumplir o no. Pero todo esto lo hice por mis hijos. En Colombia la situación está muy mala, por eso muchos colombianos dejamos nuestro país buscando algo mejor para nuestras familias, porque no hay oportunidades; económicamente el país no anda bien y también es muy inseguro", cuenta Mauricio, hoy en su pastelería El Galeón, ubicada en Maestranza 1764, frente a la plaza de "los jubilados", en Barrancas.
"No ha sido fácil conseguir esto que estamos haciendo. Tuve la oportunidad de conocer a muy buenas personas que nos han ayudado a mí y a mis amigos colombianos. Cuando llegué a Chile recuerdo que tuve que dormir la primera noche en la plaza Baquedano porque no tenía nada de dinero. Venía solo con las maletas y con las ganas de cumplir mi sueño", detalla este maestro pastelero.
Capo para la cocina
Lo que buscaba Mauricio era traer lo mejor de su país a tierras chilenas. Él durante toda su vida se ha dedicado a la preparación de alimentos. En Medellín, por ejemplo, vendía pollos asados y acá en Chile trabajó paralelamente en tres empleos con la única intención de ganar experiencia y hacerse de capital para cumplir su sueño, frase que repite una y otra vez durante esta entrevista.
"Estando en Santiago estuve trabajando en tres lugares. Terminaba un turno y me iba al otro. Así estaba todo el día. Terminaba muy cansado, pero era lo que había que hacer. En Colombia tengo dos hijos y hay que responder", cuenta Mauricio mientras prepara pasteles junto a su compañero, amigo y coterráneo Arlex Álvarez, quien hace cinco meses llegó a nuestro país con las mismas intenciones que Mauricio: "cumplir un sueño"
"Para mí todo ha sido nuevo, porque me vine a un país que no conocía y además estoy haciendo algo que no había hecho nunca, como es hacer pasteles. Pero ya he aprendido harto gracias a Mauricio", confiesa Arlex.
El galeón español
No es precisamente la famosa canción que todos hemos escuchado gracias a la Sonora Palacios o Tommy Rey. El galeón español, al que se refiere Mauricio Londoño, es la embarcación europea que llegó a tierra colombiana en busca de su conquista.
Hoy este galeón es uno de los símbolos que se puede apreciar en la bandera de Colombia.
"Es un símbolo importante, por eso quisimos llamar El Galeón a nuestra pastelería", explica Mauricio en plena preparación de un pan hawaiano que contiene jamón queso y piña... Sí, piña, al más puro estilo caribeño.
"Estaba en Santiago cuando un amigo me dijo que me viniera a San Antonio, que acá podía hacer lo que yo quería porque había pocas pastelerías a diferencia de Santiago. Me vine y comencé a buscar trabajo de a poco hasta que pudimos instalarnos con nuestro local y estamos muy contentos porque la recepción de la gente ha sido muy buena", analiza.
-¿La misma recepción ha tenido el pan con jamón, queso y piña?
-Sí. A la gente le gusta mucho, es un sabor nuevo aquí. Acá no están muy acostumbrados a estos sabores, pero a mucha gente que lo ha probado le gusta y vuelve a comprarlos.
El pan colombiano es otro producto que encanta a los comensales sanantoninos. Esta preparación es hecha a base de mantequilla y una pizca de azúcar.
El chicharrón de guayaba es un pastel cubierto con una masa que es muy parecida a las tradicionales palmeras que venden en las playas de nuestro país, pero más gruesa y más blanda; y al interior contiene guayaba.
El roscón también lleva este fruto tropical y es muy parecido en su forma a una donats, pero mucho más esponjoso y suave al paladar sanantonino.
Junto con estas delicias, Mauricio y Arlex también sirven el tradicional café colombiano requerido en el mundo entero y los berlines, conejitos y trenzas, entre otros pasteles.
"La gente nos ha ayudado mucho. Cuando comenzamos con El Galeón jamás pensamos que íbamos a encontrar tanto apoyo acá en San Antonio", menciona para culminar diciendo que "al igual que en todo trabajo, el que sea, la verdadera paga es cuando alguien te dice que disfrutó lo que tú hiciste y cuando te lo agradecen sientes que estás haciendo las cosas bien. Nosotros trajimos algo de nuestra Colombia a Chile con la mejor de las ganas y ha gustado. Por eso estamos felices y agradecidos", finaliza con las banderas de Colombia y Chile de fondo.