Crónica
La localidad de Lo Gallardo, en San Antonio, es conocida como tierra de brujos. Durante cientos de años se han tejido historias y episodios misteriosos relacionados con apariciones y hechos extraños que han pasado a ser parte del imaginario colectivo de los habitantes de este sector rural ubicado a orillas del río Maipo.
Y en eso precisamente pensaron Jacqueline Román y Lucía Plaza al bautizar su emprendimiento de tejidos en telar como "Hechiceras del Río" en honor a esta tradición de leyendas y brujos. "Lo Gallardo es tierra de brujos, entonces había que tener un nombre acorde a este mito que existe en el sector. Yo creo que también somos medias hechiceras, porque mire las maravillas que hacemos", comenta orgullosa Jacqueline.
Pero la historia de estas socias, usuarias de Indap, parte el 2012 cuando ingresan junto a otras ocho mujeres, dueñas de casa, al Programa de Formación y Capacitación para Mujeres campesinas -creado por un convenio entre Indap y Prodemu-, donde comienzan su preparación a través de asesorías técnicas, capacitación en ámbitos como desarrollo personal, organizacional y gestión de negocios, entre otras materias del rubro.
Con todo lo aprendido, estas dos mujeres egresaron del convenio el 2014, decidieron asociarse y se instalaron en un taller propio ubicado en plena avenida San Juan en Lo Gallardo, donde ofrecen actualmente sus maravillosos trabajos, entre los que destacan vestidos, ponchos, pieceras, cojines, chombas, bufandas, gorros y abrigos, entre otros productos hechos con lana natural de oveja, y técnicas mixtas en lana y fieltro.
No sólo en la casa
Lucía Plaza reconoce que "gracias a lo aprendido ahora hacemos de todo, nos hemos perfeccionado y hemos ganado varios proyectos con Indap para implementar mejor nuestro taller. Esto nos entretiene y nos llena la vida. Ya no somos solo dueñas de casa, sino que nos dimos cuenta que podíamos hacer algo por nosotras mismas y eso nos satisface como personas".
Entre los proyectos que se han adjudicado recientemente destacan una escarmenadora de lana y dos telares que obtuvieron a través de un concurso especial para mujeres egresadas de este convenio: PDI mujer rural de Indap, lo que les permitirá tejer en sus casas durante la noche.
Comercialización
En cuanto a la comercialización, estas artesanas de Lo Gallardo ofrecen sus productos principalmente en su taller ubicado en avenida San Juan 2177 (de 3 a 6 de la tarde, menos martes y jueves) y también en ferias.
Además a través de las redes sociales, como Facebook e Instagram, han generado un creciente número de clientes.
Jacqueline Román dice que "nuestro punto de ventas es una buena vitrina, porque por este camino pasa mucha gente a Santo Domingo y por otro lado a través de internet también hemos ganado clientes. Al principio nos ayudaron nuestros hijos, pero hicimos un curso de computación por Prodemu y nos ha ido muy bien en las redes sociales".
El director regional de Indap, Helmuth Hinrichsen, junto con destacar el trabajo de estas artesanas de Lo Gallardo, sostuvo que "estamos enfocados en fortalecer el trabajo de las mujeres rurales y el convenio Indap-Prodemu es un primer paso para que ellas se transformen en emprendedoras y posteriormente puedan continuar como usuarias de Indap".
2 Dueñas de casa de Lo Gallardo están detrás de este emprendimiento de tejidos.
