El club Norteamérica avanza hacia su primer siglo de vida
En julio próximo los placillanos cumplirán 100 años, por lo que esperan retornar poco a poco a los primeros puestos del fútbol amateur sanantonino y ojalá cumplir el sueño de tener una cancha propia para jugar como local.
De un lado de la cancha están formados los once marinos mercantes de nacionalidad estadounidense que permanecen en San Antonio porque el buque "Reina del Mar" donde trabajan lleva algunos días atracado en el puerto.
Frente a ellos once trabajadores portuarios locales fanáticos del fútbol que aceptaron el desafío y quisieron enfrentarse con los norteamericanos en un encuentro deportivo que sería el primer paso para la futura creación del Norteamérica, uno de los equipos más tradicionales del fútbol amateur de San Antonio. "Los gringos les pasaron las camisetas a los lancheros sanantoninos, y esas eran azules, el color que quedó para siempre del equipo. El club se formó entre gente del sector marítimo hace casi un siglo", recuerda Jorge Carrasco González, actual vicepresidente de la institución deportiva que fue fundada el 7 de julio de 1917, e hijo de uno de los socios fundadores, el recordado José Carrasco.
"Mi padre era el presidente de los lancheros en esa época. El grupo de socios fundadores eran los mismos jóvenes trabajadores del sector portuario que tenían las ganas de armar un equipo. Se reunían en el local 'El Gringo Nicolás', que quedaba en Barros Luco, esa podría decirse fue la primera sede del Norteamérica", aporta a la historia Jorge Carrasco, quien explica que su padre llegó muy joven a la ciudad puerto junto a su madre, Laura Rosa González, buscando mejores oportunidades laborales. Don José era oriundo de Concepción, mientras que su señora Laura había nacido en la ciudad de Arauco.
"Llegaron a vivir al cerro Arena y desde ahí se radicaron en San Antonio. En mi casa de chico que escuchábamos del Norteamérica, y siempre estuvimos ligados como familia a estos colores. Mi hermano Luis "Nano" Alberto, que era mi compadre y falleció hace dos años, fue presidente también de la institución y el gimnasio que tenemos en la sede del club en Placilla lleva su hombre a modo de homenaje por todos sus años de servicio al club", dice orgulloso y emocionado Jorge Carrasco González.
Historia en placilla
En club Norteamérica se hizo parte de las competencias oficiales de la Asociación de Fútbol de San Antonio (Asofútbol) y con el paso de los años dejó su origen en Barrancas para emigrar a Placilla, sector donde siguen hasta el día de hoy. El arribo de la familia Carrasco González a suelos placillanos fue el principal motivo del cambio de domicilio.
Un traslado que fue beneficioso, porque el club pudo nutrirse de varios jugadores que vivían en Placilla. Así, por ejemplo, fue como el actual entrenador de Cobresal, Emiliano Astorga, integró las filas de los azules desde la tercera infantil hasta los 18 años, cuando firmó contrato profesional con San Antonio Unido.
"Le tengo mucho cariño a Emiliano, porque era ahijado de mi hermano. Como era muy alto lo colocaban de 5, que es el stopper. Lo tuvimos de chico y estamos muy orgullosos de que haya sido formado en el club, ya que con los años se hizo un nombre como jugador y también como entrenador, donde ha tenido grandes actuaciones. Cuando estuvo a punto de salir campeón con Santiago Wanderers vinieron a hacerle varias entrevistas acá a la casa de su padre", acota Jorge Carrasco, quien personalmente firmó los contratos que ligaron al "profe Emiliano" con el SAU.
Precisamente Fernando "Mosquera" Astorga, padre del exitoso entrenador, vive actualmente en calle Portales y recibe continuamente la visita de su hijo.
"Otro jugador que salió de acá porque lo trajo su tío Patricio Gutiérrez fue Georgelino Osorio. También destacó en todas las categorías juveniles, hasta que también se fue a San Antonio Unido", agrega el dirigente.
El gran sueño
Jorge Carrasco González dice que el gran sueño del club es tener una cancha propia. Norteamérica cumplirá en julio próximo un siglo de vida, por lo que piensa que una institución con tanta trayectoria merece tener su lugar donde jugar de local.
"Ninguno de los tres equipos de Placilla tiene su cancha propia. Actualmente estamos viendo si es posible construir nuestra cancha y la de Unión Placilla en el sector de El Trigal, así que esperamos que se puedan concretar las gestiones para que este sueño que tenemos como institución pueda hacerse realidad en un corto plazo", reconoce Carrasco.
Durante los últimos años la sede social del club Norteamérica fue la que más beneficios recibió. Se agrandó la cocina, se realizaron trabajos de mejoramiento del gimnasio Luis "Nano" Carrasco y hubo arreglos en la multicancha.
"Queríamos tener una sede bien ordenada y a eso nos dedicamos este último tiempo. Ahora que estamos mejor nos dedicamos a armar las series, y la verdad que varios chicos que jugaban antes acá están dispuestos a volver por el amor a la camiseta. Eso ha sido lo único que les hemos dejado claro, ya que nosotros no le pagamos a ningún jugador", anuncia de forma categórica el vicepresidente.
En lo más alto
La idea que tiene la directiva de Norteamérica es que el club vuelva a vivir esos años de gloria que durante la década de los cuarenta los llevó a disputar un amistoso de primer nivel.
Como en el verano de 1949 Universidad Católica realizaba su pretemporada en la comuna de Santo Domingo, quería disputar un encuentro con un equipo local, y el elegido fue el Norteamérica. Los cruzados, con el arquero Sergio Livingstone y el argentino José Manuel Moreno (elegido como el quinto mejor futbolista sudamericano del Siglo 20) como grandes figuras, no pudieron derrotar al equipo sanantonino, y empataron 3-3, en un encuentro que se jugó en un estadio que se encontraba donde actualmente se ubica la Escuela de Ingenieros de Tejas Verdes.
"Haber tenido al 'Sapito' Livingstone y a José Manuel Moreno jugando contra nuestro querido Norteamérica es realmente un orgullo, y un hecho que destacamos en todos nuestros aniversarios. Queremos volver a ser uno de los clubes fuertes del fútbol amateur sanantonino, y en eso vamos a estar trabajando", dice convencido Jorge Carrasco González.