Secciones

Joven pide ayuda para salvar a su tierno gatito

El felino fue atacado por un perro rottweiler, que lo dejó al borde de la muerte.
E-mail Compartir

Carlos Rodríguez Ilabaca

Javiera Rubio (21) no ha parado de sufrir en el último tiempo. Hace dos meses se vino de Santiago a San Antonio junto a su hija Martina (6) y su gato "Gaspi" para cuidar a su abuelo, quien finalmente falleció a mediados de enero.

La bella joven se quiso quedar acompañando a su abuela, en una casa del cerro Alegre, y paralelamente comenzó a trabajar en un hotel de Las Cruces con el fin de juntar dinero para el uniforme y los útiles escolares de su pequeña hija.

Al dolor por la pérdida de su abuelo, el lunes pasado se sumó una nueva tragedia para esta novel madre que se autodefine como una "catlover". En horas de la tarde, mientras el "Gaspi" estaba en una pandereta de la casa de su abuela, fue atacado sorpresivamente por un furioso perro rottweiler de la casa vecina.

El felino, de pelaje negro y largo, sucumbió ante la fuerza de su contrincante. "Lo hizo añicos", resume la desesperada Javiera.

El "Gaspi" quedó con luxación de cadera, lesiones en los discos vertebrales de la columna y perforaciones en los intestinos y otros órganos internos producto de las profundas mordidas del can.

Pide ayuda

"No quiero que se muera. Haré todo lo posible para salvarlo", confiesa la joven, quien junto a su hija se lo ha sufrido todo tras el ataque del rottweiler.

El gran problema es que ya no tiene más dinero para continuar con el tratamiento de su amado gato. "Ya me he gastado 90 mil pesos en el veterinario, que era el dinero que estaba juntando para los útiles y el uniforme de mi hija. Me atreví a venir al diario a pedir ayuda porque no tengo más dinero y no quiero que mi gato se muera. Él y nuestro perro son parte importante de nuestra familia", admitió Javiera, quien también le pidió la colaboración a Karol Dance en esta campaña.

"Cualquier aporte o ayuda me servirá", dijo.

Quienes puedan colaborar con esta causa deben comunicarse con Javiera al teléfono 942951423 o a través de su cuenta en Twitter @javierarubiob.

90.000 mil pesos ha gastado Javiera en la recuperación de su gato. Ya no tiene dinero y pide ayuda para salvarlo.

sócrates orellana
sócrates orellana
javiera rubio y su hija no quieren que su gato se muera. por eso piden ayuda.
Registra visita

Vecina está indignada por los microbasurales

E-mail Compartir

Hasta más arriba de la coronilla está una vecina de calle Asturias en San Antonio. La razón de su molestia radica en los tres microbasurales que con el pasar del tiempo se han ido formando en dicha calle.

"El problema es la gente que viene a botar todo tipo de desperdicios, porque hasta perros muertos han dejado, ni siquiera son vecinos del sector", reclamó, con mucha molestia, Rocío Bustos, vecina de calle Asturias.

"Yo he sido testigo cuando las personas vienen en auto y dejan su basura en este lugar. Muebles, restos de madera y todo lo que les sobra en su casa lo tiran acá", agregó la afectada.

Aseguró que a raíz de la basura, su familia, que vive a escasos metros de un microbasural, está constantemente luchando contra las plagas de ratones, pulgas y todo lo que acarrean los desperdicios. "La basura no sólo atrae plagas, sino que también es un peligro latente de incendio. El problema es que cuando limpian, al otro día nuevamente está lleno de basura".

Rocío afirmó que a pesar de la demolición de la Escuela Uno, el sector sigue siendo un lugar predilecto para personas que consumen drogas y alcohol. "Este lugar está abandonado y sucio, por eso es ideal para los drogadictos. Ni los carabineros se aparecen por acá", lamenta.

"¿Qué pasa si un día una de estas personas deja una colilla mal apagada? Se quema todo nomás", añadió.

sócrates orellana
sócrates orellana
en la fotografía se puede apreciar uno de los microbasurales.
Registra visita