Mónica Jorquera Escobar.
La obligaban a conducir mientras discutían qué hacer con ella. Matarla para que no los delatara o perdonarle la vida. Dos secuestradores iban sentados en la parte trasera de la camioneta Dodge decidiendo el destino de María José Manzo, subgerenta del supermercado Carrera.
Fueron momentos de total horror los que vivió María José, a quien la secuestraron cuando salía desde el local comercial en pleno centro de San Antonio.
Calle Centenario. 11.45 horas. Sábado recién pasado. La comerciante cruzó desde el supermercado hacia la iglesia. Llevaba en la cartera el dinero de la recaudación del día. Subió a su camioneta Dodge y antes de cerrar la puerta se subió un sujeto al asiento de atrás. Le colocó un revólver en las costillas.
Según relató el esposo de la afectada, Jorge Zepeda, la mujer no alcanzó a reaccionar. "Le dijo 'coopera, coopera', dándole a entender que no hiciera nada y salieron juntos en la camioneta".
Sin poder moverse ni pedir socorro, la subgerenta condujo hacia la Autopista del Sol. Los moretones en su cintura dan cuanta de los golpes que el desconocido le dio para evitar que se moviera. Le pegó fuerte cuando sonó su celular y el delincuente pensó que respondería.
María José Manzo manejó por la Ruta 78 y a la altura de Malvilla la hicieron detenerse. Un auto blanco; antiguo, tipo Nissan V16 sedan, los esperaba. De él se bajaron tres hampones y uno de ellos subió a la camioneta para "dar apoyo" al otro delincuente.
Entre ambos obligaron a la víctima a seguir conduciendo por la autopista. Pasaron por el peaje de Melipilla. Luego la obligaron -relató el esposo de la comerciante- a dirigirse hacia el sector rural de El Paico, en la Región Metropolitana, mientras pensaban qué hacer con ella.
Afortunadamente la hicieron bajar del auto sin hacerle más daño. Eso sí, la despojaron de todos sus objetos de valor, incluyendo la camioneta y el dinero de la recaudación del "súper", monto que no fue revelado a la prensa.
"Ella caminó para pedir ayuda, hasta que pasó un colectivo al que le hizo señas. Ese chofer la llevó al Retén de Carabineros de El Paico", detalló Zepeda.
La comerciante todavía se encuentra afectada por los golpes que sufrió en las costillas y el trauma sicológico que le ocasionó estar secuestrada por cerca de una hora.
Los comerciantes del centro están conmocionados por el asalto y secuestro ocurrido a plena luz del día, cuando la calle Centenario hervía de gente.
"El tipo iba vestido como obrero, con overol y antiparras para pasar inadvertido en el centro", reveló Zepeda.
Carabineros sigue investigando y se logró recuperar la Dodge en el sector de El Monte. De la plata y de los secuestradores no se supo más.
"Ellos sabían cómo y cuándo actuar. Conocían todo de su víctima", analizó el esposo de la afectada.
11.45 horas la víctima se subió a su camioneta, cuando un delincuente entró a su vehículo para encañonarla.