Prodemu llamó a las mujeres a denunciar a sus agresores
Ruth Valladares dijo que el caso de Nabila Rifo sirve para que otras mujeres tomen conciencia.
La directora provincial en San Antonio de la Fundación para la Promoción y Desarrollo de la Mujer (Prodemu), Ruth Valladares, llamó a las mujeres de la zona a denunciar los casos de violencia intrafamiliar que sufran de parte de sus parejas.
A propósito del juicio a Mauricio Ortega, imputado por el ataque a Nabila Rifo, Valladares dijo que muchas veces "las víctimas y la familia sienten mucha vergüenza de denunciar; yo estoy muy feliz de que ella (Nabila) se haya atrevido a decir la verdad porque además se sintió respaldada por muchas instituciones".
Valladares recordó a la sanantonina Mabel Quintanilla, quien, el 16 de diciembre de 2004, fue degollada por su pareja Roberto Silva Ponce, en medio de una violenta situación ocurrida en la feria navideña que estaba instalada frente a Gobernación Provincial de San Antonio. En este caso, el hombre fue condenado a 12 años de cárcel.
"Los estudios dicen que las mujeres se demoran 7 años en hacer una denuncia seria, porque pasa que se desdicen de esas denuncias por distintas situaciones o presiones. Yo atendí a mujeres de 60 o 70 años que nunca tomaron la decisión, primero por los hijos, después por los nietos y así pasó el tiempo. Hay tantas mujeres en San Antonio que nunca se atrevieron a hacerlo", afirmó la jefa provincial de Prodemu.
Por eso, explicó Ruth Valladares, Prodemu, el Servicio Nacional de la Mujer y el programa "Familias Sin Violencia" de la Municipalidad de San Antonio están enfocados en "empoderar a las mujeres para que se atrevan a denunciar los temas de violencia".
Añadió que el dramático caso de Nabila Rifo sirve al menos para que otras mujeres que sean víctimas de agresiones tomen conciencia y decidan poner los antecedentes en manos de la justicia. "Hay que seguir hablando estos temas, las mujeres deben denunciar, además que hoy están los servicios para apoyarlas, por eso las llamo a que no callen y se atrevan a denunciar", concluyó.
En 2005, tras la condena de 12 años de cárcel que recibió su agresor, Mabel Quintanilla aseguró que "ni doce, ni quince años adentro van a borrar lo que me hizo. Las marcas me van a quedar para siempre".