Delincuentes le aguaron importante reencuentro a ingeniero santiaguino
"Solo me detuve por unos minutos. Cuando regresé al auto ya se habían llevado todas mis cosas", relató la víctima.
Por mucho tiempo Gerónimo Medina (46) imaginó cómo sería el reencuentro con sus amigos de infancia. Por eso le duele que por culpa de la delincuencia, este esperado momento no pudiera concretarse.
El fin de semana la víctima, que vive en Santiago, tenía planeado viajar a la comuna de Algarrobo, donde sería la fiesta con sus amigos.
Como una prima se enteró de su visita al litoral, aprovechó de enviarle algunos encargos a una amiga que justamente vive en la comuna de El Quisco.
"Venía para el mismo lado, por eso acepté ayudar a mi prima, pero si hubiese sabido lo que me iba a pasar, me habría hecho el tonto con la petición" dijo el afectado.
Quince minutos
Según el relato del ingeniero en informática, cerca de las 21 horas se detuvo en calle Narciso Aguirre, a pasos del centro de la comuna de El Quisco, para hacer entrega del encargo. "La amiga de mi prima vive muy cerca de ahí, pero como no había dónde dejar el auto, lo estacioné en una esquina", afirmó.
Gerónimo sostuvo que la visita a su amiga no alcanzó a durar más de quince minutos, por eso, piensa que los delincuentes lo estaban vigilando.
"Cuando dejé estacionado mi auto, se me acercó un joven diciendo que no me preocupara porque él lo cuidaría. Lo encontré medio extraño porque andaba con dos mujeres que me miraban mucho, pero como iba de pasadita no le tomé mucho asunto", explicó.
"Con suerte estuve quince minutos en la casa de mi amiga. Le pasé los encargos, me tomé un vaso de agua y pasé al baño. Cuando iba llegando a mi auto, noté que había unos vidrios en el suelo. Al acercarme me di cuenta que me habían robado", agregó.
Fin del paseo
El afectado contó que, tras romper un pequeño vidrio ubicado en la parte posterior de su vehículo, los antisociales sustrajeron todos los bolsos que tenía en la maleta y varias botellas de licor que llevaba para la fiesta.
"La verdad es que a estas alturas me importa bien poco lo que me robaron porque al final eran unos bolsos con ropa y unas botellas de vino y pisco. Afortunadamente no tenía nada de valor. Lo que me duele es que por culpa de estos ladrones me tuve que devolver a Santiago porque me dio un bajón y no quise seguir con el viaje a pesar de lo entusiasmado que estaba con el reencuentro de mis amigos", relató.
Por esta misma razón, reconoció que tampoco quiso interponer la denuncia ante Carabineros, ya que sólo atinó a regresar a su casa.
"Solo me detuve por unos minutos. Cuando regresé al auto ya se habían llevado todo. Al principio me achaqué por el robo porque nunca me había pasado, pero ahora ya estoy más tranquilo, sobre todo porque para fin de mayo organizamos una nueva reunión con mis amigos, pero esta vez en Santiago", concluyó el profesional.
Carolina Bustos Muñoz
cbustosm@lidersanantonio.cl
