Con forestación de árboles el Museo de San Antonio celebró el Día de la Tierra
Junto a los estudiantes de la Universidad Mayor de Santiago y los scouts de Llolleo conmemoraron el aniversario de la Tierra. Un ejemplo de que con voluntad se pueden hacer cosas importantes por el ecosistema.
El Día de la Tierra comenzó a ser conmemorado el 22 de abril de 1970 en Estados Unidos con el fin de generar conciencia sobre los retos para preservar el planeta Tierra. Es por este motivo que con la ayuda de un día soleado y con un hermoso paisaje del río Maipo, el Museo de Historia Natural e Histórico San Antonio (Musa) conmemoró este día que debiese ser especial para todas las personas.
Cristian Brito, encargado del Centro de Rescate y Rehabilitación de Fauna Silvestre en San Antonio y colaborador de Musa, sostiene que se realizó una ceremonia simbólica en donde asistieron diversas personas como: alumnos de la Universidad Mayor de Santiago y los grupos de scouts de Llolleo Antillanca y Alborada.
"Hoy es un día especial, sobre todo para el museo porque estamos conscientes de que hay que ayudar a la naturaleza y a la Tierra. Es el único planeta azul que tenemos. Con esta plantación de árboles colaboramos con un granito de arena al planeta", indicó.
Para conmemorar y concientizar sobre esta realidad, el museo decidió plantar árboles nativos dentro del perímetro del nuevo recinto ubicado en Cristo Rey.
"Queremos formar un gran bioparque y por eso plantamos alrededor de 150 árboles nativos como: molles, maitenes, peumo, arrayanes, palmas chilenas y algunos espinos. Todos pertenecientes a nuestro país", dijo Brito.
Explicó también que esto es para la ayuda de todo el ecosistema porque, "con la forestación de estos árboles no solo ayudará a la flora, sino también a la fauna, debido a que si los árboles crecen bonitos, grandes, con frutos y flores sirven para que llegue vida silvestre como lauchas, lagartijas, culebras, aves rapaces, zorzales, picaflores, entre otros muchos".
El naturalista y conservador del ecosistema en San Antonio agradeció la participación de los scouts, alumnos y el profesor de la Universidad Mayor que participaron en la plantación y aprovechó de dar unas recomendaciones para que todos los días los sanantoninos cuidemos nuestro medio ambiente y la Tierra. "No boten basura, planten un árbol, vayan a lugares naturales a caminar, lleven a los niños a contemplar la naturaleza y enséñenles lo importante que es, para que podamos seguir viviendo. Con solo el hecho de recoger un papel del suelo ya es un gran aporte".
Actividad
Alrededor de un hermoso paisaje los alumnos de Medicina Veterinaria de primer año de la Universidad Mayor de Santiago, recibieron un recorrido por el museo que no solo conserva el esqueleto de ballena azul y el cráneo de cachalote, sino que también exhibe objetos que pertenecen a la historia de Chile.
Luego los asistentes participaron en una charla de encargada por la guía Carolina Barbas, quien es asistente de educación. Ella se dedicó principalmente a entregar datos curiosos como que, "el museo cuenta con un centro de recate en donde llegan diversos animales. El Guiña, por ejemplo, es muchas veces confundido con un gato doméstico; sin embargo los gatos comunes le transfieren diversas enfermedades que ponen en peligro la vida de esta especie salvaje".
Carolina comenta que, "estoy en el museo hace 6 años, soy guía y estoy encargada de la educación. Esta oportunidad que se me dio acá lo es todo para mí porque me ha ayudado a desarrollarme como persona. Nunca había imaginado trabajar en un lugar como este, pero siempre me gustó la educación y los animales, así que entregar este conocimiento ha sido una forma de retroalimentación, por lo mismo que estamos celebrando hoy el Día de la Tierra. Esta jornada lleva 47 años desde su creación en Estados Unidos y no debiese ser solo hoy, sino que todos los días. Nosotros mismos nos estamos encargando de destruirla".
Tras la charla y el recorrido, se les invitó a los alumnos a plantar un árbol para que recuerden la importancia que es preservar la naturaleza en la cual vivimos.
La alumna de primer año Denise Carreño, explica el porqué se da este encuentro en San Antonio. "Es una invitación que nos da la universidad. He encontrado muy bonito el lugar y que justo coincidiera con el Día de la Tierra lo ha hecho más especial aún, porque tiene plena relación con lo que estoy estudiando que es Medicina Veterinaria. Los animales me encantan y forman parte del planeta. Debiésemos tener conciencia todos los días, no solo un día".
El docente encargado de la carrera de Medicina Veterinaria es Óscar Acevedo e imparte un ramo introductorio que permite a todos los primeros años asistir al museo. "Es valioso lo que tienen acá en San Antonio, porque conozco el museo desde hace años, por eso traemos a los estudiantes para que visiten y recorran el lugar. Luego los llevamos al río Maipo para que conozcan la biodiversidad de especies que habitan en él".
El académico agregó a su vez que, "el Día de la Tierra es valiosísimo y me gustan este tipo de celebraciones que están relacionados con el medio ambiente porque la gente por al menos una oportunidad, toma conciencia y valora los recursos que poco a poco hemos ido destruyendo".
El Día de la Tierra no es para celebrar, más bien, es una invitación para que todos realicemos más acciones en favor del lugar donde vivirán futuras generaciones. Se debe tomar conciencia sobre la contaminación del medio ambiente y cómo afecta a plantas, animales y humanos. Si nos comprometiéramos con el ahorro de agua, con la utilización de energías limpias o conociéramos la lista de los animales en peligro de extinción, sin duda contribuiríamos a mejorar lo que nos rodea y lo que dejaremos a las futuras generaciones.