La seguidilla de fuertes sismos tiene a los sanantoninos con "el corazón en la mano"
Desde la Gobernación Provincial llamaron a la calma y advirtieron que tras el fuerte sismo de 6,1° Richter, los eventos fueron decayendo y separándose en el tiempo. Durante esta jornada seguirán las réplicas.
Para quienes temen a los temblores, ayer fue un día complicado. Al menos cincuenta sismos -aunque no todos perceptibles- fueron registrados entre la noche del sábado y la tarde de ayer como consecuencia del fuerte temblor 6,1 grados Richter que remeció la zona central del país poco antes de la medianoche del sábado. Su epicentro fue localizado a 48 kilómetros al Oeste de Valparaíso.
Esa misma tarde, otros temblores, pero de menor magnitud también se dejaron sentir. Según la Onemi, se trató de precursores y todo lo que pasó después del remezón 6,1 corresponden a réplicas.
"Éste hasta el momento se ha comportado como un sismo principal, para luego dar paso a la actividad de réplicas que hasta el momento se ve como una secuencia totalmente normal. Cabe señalar, que hemos visto que estos eventos están decayendo y como se están separando en el tiempo", dijo el director nacional de la Onemi, Ricardo Toro, quien, junto al director del Centro Sismológico Nacional, Sergio Barrientos, hizo un llamado a mantener la calma y no alarmarse. Más sismos podrían seguir sacudiéndonos.
Réplicas
"Tenemos más de cincuenta temblores registrados. No hay duda que seguirán habiendo réplicas y probablemente, algunas de ellas sean sensibles", explicó Barrientos.
No hubo daños, ni lesionados y rápidamente desde la Armada se informó que no habría tsunami, sin embargo, se registró gran número de vehículos intentando cargar combustible durante la madrugada del domingo. La expectación fue creciendo a medida que se fueron desencadenando las réplicas posteriores.
Por la mañana la tensión ya había disminuido y se comprobó que no había situaciones que lamentar.
Recién por la tarde de ayer, con una réplica de 5.8 grados Richter, la más grande registrada hasta el cierre de esta edición, se reportó la caída de una antena en el consultorio de Cartagena sin afectar propiedades aledañas ni personas.
Confianza
El gobernador de la provincia de San Antonio, Manuel Villatoro, se sumó a los llamados a la calma y dijo que "aunque estos eventos no se pueden anticipar", los sismos serían réplicas y "no deberían haber, según nos ha informado Onemi, otro temblor de gran magnitud".
La autoridad también ratificó que "si bien hay un nerviosismo" entre la gente, no hay consecuencias de los movimientos telúricos.
Agregó que los servicios de emergencia se encuentran preparados para cualquier eventualidad y, en "otro asunto muy importante en estos casos", invitó a la población a informarse por los canales oficiales y "no hacer caso de lo que circula en las redes sociales".
Entre los sanantoninos, en tanto, había máxima expectación.
"Me pilló acostada y quedé con el corazón en la mano. Pensé que se iba a largar un terremoto", dijo Sofía Urra, ayer por la tarde en el centro de Barrancas.
"Uno siempre tiene que estar listo, si este es un país sísmico, pero igual a uno se le olvida. Por si acaso no estaría malo comprar un paquete de velas", agregó Roxana Marambio.



